El ministro bonaerense de Desarrollo de la Comunidady referente de “La Cámpora”, Andrés “Cuervo” Larroque, aseguró que el presidente Alberto Fernández, “junto a los grandes medios y la oposición”, se sumó “a la lógica de minimizar” el intento de magnicidio contra la vicepresidenta Cristina Kirchner ocurrido el 1° septiembre pasado, lo que -se según él- reabrió las ya virulentas internas en el Frente de Todos (FdT).
“El tema fue licuado por los grandes medios de comunicación y la oposición tuvo alguna primera postura de condena, pero después también se sumó a la lógica de minimizar el hecho. Y, lamentablemente, creo que también el presidente Alberto Fernández participó de esa licuación. Y esto es muy grave”, acusó Larroque.
Además, manifestó que “el hostigamiento y los ataques” parecieran ser “funcionales a estrategias de otros actores políticos, inclusive del propio Frente de Todos”.
El funcionario del gobierno de Axel Kicillof definió como “muy penosa la situación” y cargó contra las medidas que tomó la Casa Rosada por entonces. “Más allá de la declaración del feriado del día siguiente, más o menos discutible y muy rara cuando estaba en marcha un paro de la CGT, me parece que en los días subsiguientes no se puso en la centralidad de la política argentina el hecho de que quisieron asesinar a la Vicepresidenta”, dijo.
En cuanto a la continuidad del frente oficialista, también cargó las tintas contra Alberto Fernández. “Nosotros no podemos condenar la unidad por los equívocos que ha tenido el Presidente. Creo que hay que seguir apostando a la unidad. Me parece que no hay que confundir esta situación, que uno podría calificar de cierta ingratitud y poca inteligencia también, porque a Alberto se le dio una oportunidad muy grande y confundió cómo debía ser su vínculo con Cristina y su rol”, apuntó.
En declaraciones a La Tecla, en paralelo, indicó que “el peronismo debe comprender que está yendo a un callejón sin salida si no resuelve la situación de Cristina (Kirchner)”, por la causa Causa Vialidad, en la que la vicepresidenta fue condenada en primera instancia a siete años de prisión e inhabilitación para ejercer cargos públicos, decisión de la Justicia que el referente de la organización que conduce Máximo Kirchner nombra como una “proscripción”.
Por último, Larroque destacó “el compromiso de Sergio [Massa] de haber ido a tomar un fierro caliente” y que “la tarea se desempeña con frontalidad y permanente diálogo; a veces con más o menos acuerdo, pero siempre en comunicación”.
Pero volvió a pegarle a Alberto Fernández por la gestión de la política social. “La cuestión de la justicia social y de la distribución del ingreso es un tema de segundo orden, por lo menos para el Presidente”, cerró.
Aníbal. Poco antes había intervenido en la controversia entre el Presidente y su ministro del Interior, Wado” De Pedro, su colega de Seguridad, Aníbal Fernández, quien lo descartó como su precandidato en las presidenciales y reiteró que su postulado es el primer mandatario. “No es un candidato mío ni por casualidad, mi candidato es el Presidente”, afirmó sobre De Pedro.
Además, reveló que habló con el funcionario neocamporista el sábado, tras sus críticas al jefe de Estado por su enojo al no haber sido invitado a un encuentro con Lula da Silva y organismos de Derechos Humanos.
“La expresión de Wado no es feliz, y no es cierta. Tengo una excelente relación con él, es una cuestión política”, se escudó el ministro, y contó: “Cuando ganó el presidente Lula en Brasil, en el búnker estaba Wado. Al día siguiente llegó el Presidente a saludar y se organizó un almuerzo”.
En la misma línea, continúo: “Wado no tenía nada que hacer, sin embargo el Presidente fue quien insistió para que él sea parte de la comitiva que iba al almuerzo con Lula da Silva. De hecho yo no formé parte de esa delegación”.