Una familia de cuatro miembros que habita en la Ciudad de Buenos Aires necesitó en junio ingresos de por lo menos $ 131.332,97 para no ser considerada en situación de indigencia, $ 235.931,45 para no quedar comprendida en la pobreza y $ 363.666,30 para ser catalogada como de clase media. Así lo indican los datos difundidos por la Dirección General de Estadística y Censos porteña.
De esa forma, los gastos de la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que marcan el límite de la indigencia, tuvieron el mes pasado un aumento de 4,48%, medio punto porcentual menos que el 4,98% de incremento registrado en mayo, en tanto el acumulado en doce meses llegó a 129,92%, 1,23 puntos menos que el 131,15% de la medición previa.
En el caso de la Canasta Básica Total (CBT), que establece el tope de la pobreza, el incremento mensual fue de 5,99% (menos que el 6,73% de mayo) y el interanual de 125,79% (123,38% en el mes anterior).
Mientras que la Canasta Total (CT), que en diferentes proporciones delimita al sector medio frágil, la clase media y los sectores acomodados, subió 6,16% en el mes (menor al 6,96% de mayo) y 126,10% en relación con junio de 2022 (122,71% en la medición anterior).
Los montos señalados no incluyen el pago de alquiler de vivienda ni de expensas comunes.