La viuda del comandante de un avión que se estrelló en 1997 demanda al directorio español de la empresa, por entonces privatizada, y apunta en particular contra un profesional que se propone por la oposición al estratégico Consejo de la Magistratura.
María Elena Blanco Seco, viuda del comandante Rodolfo Cecere, el piloto que comandaba el vuelo 2553 de Austral que se estrelló en Fray Bentos el 10 de octubre de 1997, acaba de demandar a todo el ex directorio español de Aerolíneas Argentinas-Austral, por entonces privatizada, por “asociación ilícita y lavado de dinero” en perjuicio del Estado argentino.
La presentación, que ingresó hoy por mesa de entradas en el juzgado a cargo de María Servini de Cubría, parece atenerse a derecho, pero además apunta con especial dedicación al abogado argentino Horacio Fargosi, quien, casualmente o no, también concita la atención del gobierno porque es candidato por la lista no oficialista para representar al Colegio Público de Abogados en el estratégico Consejo de la Magistratura.
Blanco Seco revela en su denuncia la “trama de complicidades” para vaciar la empresa que habría sido la responsable de la muerte de su marido y los demás pasajeros por “la vetusta aeronave comprada en ese marco defraudatorio que incluía el financiamiento espurio de la política del Reino de España con dinero proveniente de las arcas de nuestro pueblo”. En la tragedia murieron 74 pasajeros y tripulantes.
El texto se difundió hoy pero, en rigor de verdad, ya existe una causa penal por el vaciamiento de la empresa, con los mismos acusados, que se arrastra desde hace una década, pero la Cámara Nacional de Casación Penal revocó en marzo pasado los sobreseimientos masivos por prescripción penal y ordenó reabrir la investigación.
La nueva presentación está dirigida contra el empresario español Antonio Mata, otros ex miembros del directorio, además de Fargosi, y representantes de la SEPI y otros organismos estatales españoles.
Tal vez por encono, tal vez porque la cara de Fargosi puede verse en estos días en afiches presilitistas pegados en la zona de Tribunales, la viuda le dedica párrafos exclusivos al candidato para renovar la presencia letrada en el Consejo de la Magistratura en elecciones convocadas para el 31 de agosto próximo.
Según la denunciante, el letrado fue “el cerebro de toda la maniobra que provocó una gigantesca estafa al pueblo argentino” y actuó como “denominador común en todas las integraciones sociales, ya sea como síndico, director, asesor o presidente de las empresas del grupo”.
Fargosi es la cabeza de un estudio importantísimo dedicado a la constitución de sociedades, que se hizo próspero en la década del ’90 cuando, como abogado, participó del proceso de privatización de Aerolíneas, empresa de la cual terminó integrando su directorio, siempre ligado a Mata.
Cuando fue privatizada, la empresa aérea de bandera estaba controlada por otra firma, Interinvest SA, con domicilio legal en el estudio Fargosi.
El abogado siempre estuvo y ahora también, aunque en la otra vereda: actúa en la demanda de la empresa ante el CIADI para ser indemnizada por la reestatización dispuesta en la era K.
Casualmente, Fargosi fue vuelto a ser mencionado en los últimos meses como alguien que habría tenido un rol menor, entre bambalinas, en lo ocurrido con el diario Crítica, lanzado junto a Jorge Lanata y luego quebrado por Mata en tiempo record.
Ahora se candidateó al Consejo de la Magistratura, el organismo clave para el Gobierno a la hora de nombrar y remover jueces en todo el país, y sujeto a un proceso de cambios que todavía tiene final incierto. Y hoy, finalmente, fue denunciado.