Enfrentan así la estrategia opositora de impugnar todo lo que aprueben en la Cámara alta los senadores “grises”, los que nunca se sabe cómo votarán.
Después de algunas idas y vueltas, finalmente el kirchnerismo presentó una denuncia judicial para que se investigue si existieron sobornos en el Senado.
Nueve integrantes del Frente para la Victoria firmaron el escrito que recayó en el juzgado federal a cargo de Sergio Torres, un magistrado que accedió al cargo durante el gobierno de Néstor Kirchner y que contó con el aval de muchos de los denunciantes.
“Venimos a interponer denuncia formal a fin de que se analicen y, de corresponder, se investiguen y eventualmente se sancionen los presuntos hechos que distintos senadores y diputados nacionales han denunciado públicamente en relación al funcionamiento institucional del Senado de la Nación Argentina”, sostiene el texto, que fue acompañado por Miguel Angel Pichetto, Daniel Filmus, Blanca Osuna, Nicolás Fernández y Marcelo Guinle, entre otros.
Para los oficialistas los dichos de la oposición no tienen fundamentos. Los encuadran dentro de una campaña de desprestigio destinada a cuestionar las votaciones en las que el oficialismo logró imponer sus proyectos. Y condicionarlos en el futuro. Por su parte, Pichetto descalificó las acusaciones que ayer le había dedicado la Unión Cívica Radical.
“Es totalmente legítimo, en el marco de los acuerdos entre el Gobierno Nacional y los de las provincias aliadas, que se dé apoyo mutuo, que se puede derivar en el acompañamiento de iniciativas del oficialismo en el Congreso, y esto no implica ningún tipo de presión o método coactivo”, adujo Pichetto en respuesta a la acusación formulada por el radical jujeño Gerardo Morales.
En medio de estas acusaciones, en la Cámara alta, hoy no se puede confirmar que el miércoles próximoel cuerpo logre sesionar. La oposición, por lo pronto, ya desistió de llevar al recinto el proyecto por el 82 por ciento móvil para las jubilaciones mínimas. El oficialismo no tiene muchos temas que le interesen, salvo la necesidad de darle ingreso al expediente para designar al kirchnerista Dante Dovena como embajador en Uruguay. De esta manera podría iniciarse un proceso que demorará unas semanas hasta que el cuerpo le otorgue acuerdo al pliego. Dovena fue visto durante esta semana recorriendo algunos despachos de los principales senadores del oficialismo.