La muerte de Néstor Kirchner abrió la puerta a muchas especulaciones. Una hablaba del retorno de Alberto Fernández al gobierno, quien salió a desmentirlo rápidamente.
“Salí a decir que no vuelvo al gobierno”, ordenó Alberto Fernández a uno de sus colaboradores cuando se enteró que, entre otros, el periodista Jorge Lanata había dicho en una entrevista que “en este momento a Cristina le haría falta un jefe de Gabinete” como él.
Había estado en la capilla ardiente, discretamente ubicado en una tercera línea detrás de la presidenta, pero no la saludó. Sortear el anillo de seguridad que la rodeaba hubiera sido, tal vez, una empresa destinada al bochorno de un rechazo.
El ex jefe de Gabinete de Néstor Kirchner y de los primeros meses de Cristina no tiene desde hace tiempo acceso a la presidenta, a tal punto que tuvo que hacerle llegar sus condolencias a través de un empresario amigo íntimo de la familia.