A un mes de las vacaciones de invierno, cuatro días no laborales serán el termómetro de lo que viene para la industria turística, gastronómica y del entretenimiento.
Son casi interminables los festivales que preparan las provincias para revivir tradiciones folklóricas, celebrar productos locales como la trufa o los cítricos, honrar a las colonias de inmigrantes suizos e italianos y conmemorar con ritos ancestrales el solsticio invernal.
Impulsan la creación de un nuevo centro de observación astronómica en el norte de Argentina, donde ya hay varios para disfrutar del espectáculo de las estrellas.
Destinos emblemáticos para esta época como Salta, la Quebrada de Humahuaca, Iguazú, Colón, Carlos Paz, Mendoza, Tandil, El Calafate y Bariloche tuvieron ocupación prácticamente plena y la provincia con mayor nivel de ocupación fue San Juan con un promedio de 97%.