Aunque la audiencia en la que se sabrá finalmente si esas muestras sirven para avanzar en el trámite se hará el viernes 19, Gaceta Mercantil recogió indicios de diversas fuentes que indican que podrían ser útiles para confrontarlas con las 2.500 existentes en el archivo del Hospital Durand. De lo contrario, la juez debería ordenar una toma compulsiva.
El resultado de la pericia para determinar si puede trazarse un ADN en base a muestras de sangre, saliva y vestimenta de los hijos adoptivos de la dueña del Grupo Clarin, Ernestina Herrera de Noble, se presentará oficialmente el próximo 19 de noviembre a las 9 en el despacho de la juez federal de San Isidro Sandra Arroyo Salgado.
Sin embargo, las especulaciones han ganado terreno desde el mismo momento en que la magistrada convocó a las partes a esa audiencia y todo apunta a que de las muestras pudo elaborarse un perfil genético de los jóvenes y que son aptas para establecer el ADN, según pudo saber Gaceta Mercantil.
El paso final será ordenar su comparación con las más de 2.500 muestras existententes en el Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG), la medida a la que desde siempre se opusieron Felipe y Marcela Noble Herrera y su madre adoptiva.
Todos recuerdan una anécdota ocurrida durante la apertura de los sobres con las muestras de sangre e hisopado de saliva entregadas voluntariamente por los jóvenes en diciembre de 2009 al entonces juez del caso Conrado Bergesio, quien había resuelto compararlas sólo con el ADN de dos familias querellante en el caso y en la sede del Cuerpo Médico Forense de la Corte Suprema de Justicia.
La fiscal Rita Molina, que estuvo presente en estos dos actos judiciales, preguntó a boca de jarro a los peritos del BNDG si veían “algún hongo o humedad” en las muestras y todos respondieron que “a primera vista” estaban “en perfecto estado”.
No osbtante, nadie se anima a anticiparse de manera oficial a la audiencia del 19 y la razón es que se busca conservar las formas para evitar en lo posible más recusaciones y objeciones a la juez del caso que sigan dilatando la cuestión.
“Antes de fin de año se sabrá la verdad”, anticipó optimista la fiscal Molina, aunque aclarando desconocer el resultado de la pericia ya ordenada.
En distintas fuentes se coincide en adelantar que los peritos del Banco, dependiente del Ejecutivo, establecieron la viabilidad del uso de las muestras de sangre y saliva que estuvieron guardadas en la caja fuerte del juzgado de Bergesio hasta diciembre pasado, momento en el que Arroyo Salgado las fue a buscar y dispuso la preservación.