El presidente Alberto Fernández sostuvo este miércoles que se siente “bien”, luego de haberse sometido anoche a estudios en el Sanatorio Otamendi de Buenos Aires con motivo de un “dolor lumbar agudo” y se determinó la presencia de “una hernia de disco lumbar”, según el parte de la Unidad Médica Presidencial.
“Me siento bien. Una hernia de disco que se desplaza genera un dolor muy intenso. Ese dolor ha mermado a base de analgésicos, pero me exige acotar la actividad. Por eso mi agenda seguirá en Olivos y, lamentablemente, debí suspender los viajes que tenia previstos a Chaco y Entre Ríos, que trataré de hacerlos la semana entrante”, señaló el jefe de Estado al portal Infobae.
“El dolor por la hernia de disco se aplacó, pero por orden médica es mejor llevar la agenda a Olivos para acotar la movilidad”, detalló el primer mandatario, quien además informó que “antes del viernes” se someterá a un “bloqueo”, una técnica médica que el Presidente comparó con “una infiltración en el disco herniado”.
“El Presidente presenta un cuadro de dolor lumbar agudo, motivo por el cual se realizarán los estudios correspondientes con el fin de poder administrarle un tratamiento específico. Se mantendrá informada a la opinión pública”, consignó el parte oficial firmado anoche por el médico Federico Saavedra.
Más tarde, en un nuevo comunicado, se informó que al Presidente “le realizaron los estudios correspondientes, evidenciándose una hernia de disco lumbar, por tal motivo se realizará un bloqueo radicular programada en 48/72 horas”.
Además, se indicó “reposo y adecuar sus actividades en la Residencia presidencial de Olivos”.
El anterior episodio de salud del primer mandatario había sido en noviembre del año pasado en Bali, Indonesia, donde debió ser atendido por una gastritis erosiva con signos de sangrado, ante lo cual el canciller Santiago Cafiero fue el encargado de reemplazarlo en la cumbre de líderes del G20.
Fernández fue trasladado entonces al Sanglah General Hospital de Bali, acompañado por el ministro de Salud de Indonesia, Budi Gunadi Sadikin; el doctor argentino Manuel Estigarribia, de la Unidad Médica Presidencial; y los secretarios General de la Presidencia, Julio Vitobello; y de Prensa y Comunicación, Gabriela Cerruti.
En ese centro asistencial le realizaron análisis de sangre y una endoscopia, que determinó el cuadro de gastritis, indicaron por entonces fuentes de Presidencia.
Sin embargo, una vez recuperado, Fernández retomó la actividad en ese país y mantuvo una reunión bilateral pautada con su par chino, Xi Jinping, antes de emprender el regreso a Argentina.