La inflación de abril fue de 8,4%, la más alta para un solo mes en 21 años, y muy por encima de lo que esperaba el Gobierno, que buscaba no superar el también récord del 7,7% de marzo, la suba de precios mensual más alta desde abril de 2002, en plena crisis por la salida de la convertibilidad del “1 a 1”.
Con esta cifra informada este viernes por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), la inflación acumulada en los primeros cuatro meses de 2023 es de 32%. Y el incremento interanual es 108,8%.
La división de mayor aumento en el mes fue Prendas de vestir y Calzado (10,8%) por cambios de temporada. Le siguió Alimentos y bebidas no alcohólicas (10,1%), con los incrementos más altos en Verduras, tubérculos y legumbres; Leche, productos lácteos y huevos; Azúcar, dulces, chocolates, golosinas, etc. y Carnes y derivados. También se destacaron las subas de las divisiones Restaurantes y hoteles (9,9%); y Equipamiento y mantenimiento del hogar (8,6%).
El aumento de Alimentos y bebidas no alcohólicas (10,1%) fue el que más incidió en todas las regiones. Al interior de la división, impactó la suba de Carnes y derivados, y de Verduras, tubérculos y legumbres, seguidas por Leche, productos lácteos y huevos; y finalmente Pan y Cereales.
Las dos divisiones de menor variación en abril fueron Educación (5,0%) y Bebidas alcohólicas y tabaco (3,8%).
A nivel de las categorías, Estacionales lideró el aumento (12,6%) seguida por el IPC Núcleo (8,4%); en tanto que los Regulados registraron un incremento de 4,9%.
Con el 7,7% de marzo, en febrero 6,6% y en enero una suba del 6%, en el ministerio de Economía esperaban que al menos en abril se detuviera la espiral inflacionaria que había marcado el primer trimestre del año.
Incluso en el Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) que publica el Banco Central (BCRA), los analistas estimaron una inflación mensual de 7,5% para abril. Para las consultoras privadas, ese es el promedio esperado: algunos estimaron que los precios podrían subir hasta el 8%. Se quedaron cortos.