La empresa británica de servicios financieros multinacional HSBC compró por el precio simbólico de una libra la filial británica de Silicon Valley Bank (SVB) de Estados Unidos tras la quiebra, como parte de un acuerdo con el Banco de Inglaterra (BoE), lo que alivió a las empresas tecnológicas del Reino Unido que advirtieron que podrían quebrar sin ayuda, según anunció el Tesoro británico.
En ese sentido, el Banco Central de Inglaterra aseguró que el acuerdo garantizará la continuidad de los servicios bancarios, minimizará la interrupción del sector tecnológico del Reino Unido y respaldará la confianza en el sistema financiero, en medio de la crisis global desatada por la quiebra del SVB.
“Los depósitos estarán protegidos, a través del acuerdo de rescate con HSBC”, afirmó el ministro de Finanzas británico, Jeremy Hunt, quien subrayó: “Ayer dije que cuidaríamos de nuestro sector tecnológico y hemos trabajado con urgencia para cumplir esa promesa”.