El PSG no detiene su marcha en la Ligue 1, pero tras golear ayer al Montpellier 5-2 volvió a explotar la interna de vestuario que tiene como protagonistas a Neymar y a Kylian Mbappé, dos de las mayores figuras del equipo después de Lionel Messi.
El francés erró un penal y el brasileño acertó el suyo (hizo otro gol de jugada), tras lo cual el sudamericano quedó en el centro de la escena por respaldar en redes sociales una serie de mensajes en contra de su compañero, al que se lo vio sumamente fastidiado en el partido.
En su cuenta oficial de Twitter, el paulista “likeó” una serie de mensajes en contra de Mbappé, quien falló su penal cuando el partido estaba 0-0, y el portal de L’Equipe asegura que los “me gusta” desataron un “Penaltygate” en PSG.
El primer mensaje que apoyó Neymar fue uno de una cuenta “fandom” dedicada a él que decía: “El mejor pateador de penales del mundo tiene nombre y apellido: Neymar da Silva Santos Júnior. Respeten a mi 10, ok?”.
Luego, el otro tuit avalado por Neymar señalaba como un “absurdo” la decisión del entrenador Cristophe Galtier de respaldar a Mbappé como el primer pateador de penales. Y por último, Neymar asintió a otro mensaje que trataba al francés como “el dueño de PSG”.
Luego del partido, Galtier fue consultado por este tema e intentó minimizar la polémica: “El orden de elección del pateador fue definido para este partido. Kylian pateó el primero y fue lógico que después lo hiciera Neymar. Veremos más adelante”, aseguró el DT francés.
Mucho se habló durante el verano europeo sobre cómo sería el nuevo vestuario del PSG tras la llegada de un técnico estricto como Galtier y la renovación de contrato de Mbappé como máxima figura del plantel.
La prensa francesa asegura que el futbolista local pidió una serie de condiciones para renovar que no cayeron bien en algunos de sus compañeros, principalmente en Neymar, el mayor apuntado.
En primer Lugar, Mbappé pidió ser la referencia mundial del club, algo que suena lógico ya que es el futbolista con mayor proyección de la actualidad.
En segundo lugar exigió que su posición en el campo no dependiera del lugar que ocupen Messi o Neymar, algo a lo que parece difícil de acceder ya que se supone que ese es el terreno del DT.
Pero eso no fue todo: el francés también pidió mano dura con aquellos que llegan tarde a los entrenamientos. En su desesperación por retenerlo, club le ofreció a Mbappé ser el dueño de los penales, algo que quedó de manifiesto en el partido de ayer.
Si a esto se le suma que durante todo el mercado de fichajes se habló de una posible salida del equipo de Neymar, se genera un combo letal, que siempre está a punto de explotar.