Las campañas políticas del expresidente Mauricio Macri siempre han estado muy cercanas al mundo de los negocios, del que proviene, lo que siempre ha generado conflictos.
Este año que recién comienza lo encuentra aún sin decidir (o revelar) si irá por su “segundo tiempo” o no, carrera en la que ya están anotados al menos dos de sus principales “sucesores”, Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich.
No obstante, la busca mantenerse en en el candelero, tanto con reuniones con sus adláteres del PRO como con sus amigos del “jet set” internacional: en este caso, en sus vacaciones en la Patagonia recibió este viernes al emir de Qatar, Tamin bin Hamad Al Thani, quien tras tomar el centro de la escena planetaria con el Mundial que organizó -y ganó la Argentina-, inició una minigira de placer y negocios por América del Sur.
Tras celebrar la llegada del nuevo año en Punta del Este, en la costa de Uruguay, acompañado por el extenista argentino Gastón Gaudio, el emir qatarí viajó a la Patagonia con una importante comitiva que se traslada en un Boieng 747.
Este viernes Tamin llegó al exclusivo country Cumelén, en Villa La Angostura, donde lo Macri recibió con los brazos abiertos, una vez más. Después de alojó en la más exclusiva suite del hotel Llao Llao.
En 2016, vía Gaudio, Macri inició la relación, que se solidificó en el tiempo a pesar -o gracias- de la causa judicial en la que se investigó si existía una incompatibilidad del entonces primer mandatario en las negociaciones para que el qatarí invirtiera en el país.