El embajador argentino en Venezuela, Oscar Laborde, recibió hoy al diputado chavista Pedro Carreño, quien había tildado de “pelele, títere” y “jalabolas” al presidente Alberto Fernández por la retención desde el pasado 8 de junio de un avión venezolano-iraní en Ezeiza por una investigación por posibles nexos con el terrorismo.
Carreño estuvo en la embajada argentina en Caracas junto a otros treinta miembros de la Asamblea Nacional Constituyente de Venezuela y el representante del Palacio San Martín le reprochó los calificativos “inadecuados e inoportunos“ hacia Alberto Fernández y le manifestó el “desagrado” y el “enojo” que generaron sus expresiones.
Ayer, la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, sostuvo que las declaraciones de Carreño “son expresiones de diferentes actores de la vida venezolana” pero que “no implica un incidente diplomático”.
Los legisladores venezolanos se acercaron a la embajada argentina para exigir la liberación del avión. Ante esta situación, el gobierno argentino le aclaró al venezolano que el Boeing 747 de carga de la empresa Emtrasur está retenido por orden de un juez federal, desligándose de las acusaciones de connivencia con Estados Unidos, al que el presidente Nicolás Maduro acusó de querer “robárselo”.