El Gobierno pagó este viernes un vencimiento que tiene el país con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por 2.700 millones de dólares, pero lo abonó en parte con Derechos Especiales de Giro (DEG), la moneda que utiliza el organismo multilateral, y en parte con yuanes chinos de libre disponibilidad.
Se utilizaron 1.700 millones de Derechos Especiales de Giro y, el resto, se abonó en yuanes. Como había anticipado el jueves la portavoz presidencial, Gabriela Cerruti, de esta manera “se cumple con lo que se acordó con el Fondo y al mismo tiempo no se pondrán en riesgo las reservas del Banco Central”, que en el mes de junio acumula un saldo negativo de casi 700 millones de dólares en el mercado cambiario.
El cumplimento de este vencimiento se da en el marco de la continuación de las conversaciones correspondientes a la quinta revisión del acuerdo de Facilidades Extendidas ya renegociado el año pasado cuando Martín Guzmán era ministro de Economía, tras la toma del crédito original por la administración de Mauricio Macri en 2018.
En base al programa existente, de obtener el aval del organismo, la Argentina recibiría unos 3.000 millones de DEG -equivalentes a casi 4.000 millones de dólares.
El objetivo del Gobierno argentino es que el desembolso sea mayor a ese monto, en concepto de adelanto de fondos de lo que resta del semestre, para ayudar a paliar el fuerte impacto de la sequía en las reservas internacionales en poder del Banco Central.
El miércoles y jueves de la semana pasada eran las fechas inicialmente previstas para abonar al organismo 921 millones de dólares y 1.780 millones de dólares, respectivamente.
El Gobierno, con aval implícito del FMI, postergó ese pago una semana, a la espera del avance en las negociaciones de la reformulación del programa.
Este martes, el ministro de Economía y precandidato a presidente por Unión por la Patria (UXP), Sergio Massa, había expresado durante un acto organizado por la Cámara de la Construcción (Camarco) que las negociaciones técnicas estaban en su etapa final.
“Estamos terminando de saldar el semestre, o los dos trimestres, con el Fondo, dejé al equipo trabajando. En las próximas horas se va a conocer públicamente cómo es el programa para los próximos seis meses”, dijo Massa.
En el Gobierno esperan que los fondos frescos lleguen a mediados del mes próximo, si es que el acuerdo técnico se cierra antes de fin de mes, y por el propio proceso intrínseco del FMI, que demanda alrededor de dos semanas, plazo en el que el staff eleva el informe a los miembros del Directorio para luego pasar a su discusión y aprobación final.
Respecto a los detalles técnicos de cómo sería la operación de este viernes, desde el Gobierno precisaron que se utilizará la moneda del FMI, los DEG que ya tiene el Tesoro argentino en su poder en reservas, y otra parte se realizará en yuanes de “libre disponibilidad”, generados con el swap con China, que fue ampliado recientemente en el marco de una gestión que llevó adelante Massa en el país asiático.