Athlético Paranaense dio el gran golpe al empatar 2-2 con el Palmeiras en San Pablo y consiguió el pase a la final de la Copa Libertadores por segunda vez en su historia.

En los últimos cinco minutos del partido, el equipo que dirige Luis Felipe Scolari remontó un 0-2 en contra ante el vigente bicampeón del máximo torneo continental cuando nada hacía presagiar ese desenlace porque el “Verdao” había sido claramente superior.

De Palmeiras puso rápido en ventaja, a los 3 minutos de juego, con el tanto de Gustavo Scarpa  luego de un fallido despeje de Pedro Henrique., gol el que los locales igualaban la serie y se ponían a tiro para alcanzar su tercera final y soñar con obtener su cuarta estrella en la competencia ya que bajo la conducción del propio Scolari se coronaron en 1999.

Con la apertura del marcador ganaron en tranquilidad, pero a los 45 minutos fue expulsado Murilo Cerqueira por un tremendo planchazo a Vitor Roque, el árbitro uruguayo Esteban Ostojich fue llamado por el VAR y, tras analizar la jugada, decidió sacarle la roja al defensor local.

Con uno menos Palmeiras siguió siendo protagonista y a los 54 minutos, luego de un lateral de Marcos Rocha, Gustavo Gómez anticipó en el área, la defensa se quedó y el paraguayo la peinó para convertir el segundo tanto.

Desde ese momento el elenco dirigido por Abel Ferreira se puso al frente en la serie y se acercaba a conseguir la clasificación a la final. Pero el flujo de la marea cambió y Paranaense comenzó a llegar gracias a una mayor posesión.

A los 63 minutos llegó el descuento que revivió al visitante luego de una combinación de ocho pases que terminó con el gol de Pablo.

Los jugadores del equipo “gaúcho” tomaron la pelota y rápido buscaron que el rival sacara del medio para intentar conseguir el tanto del empate que le diera el pase a la final, por el 1-0 logrado en la ida.

Palmeiras intentó aguantar con el aliento de 45 mil almas pero el Paranaense siguió atacando y un remate de Vitinho pasó muy cerca del travesaño, pero los locales lograron salir y pudieron haber liquidado la clasificación con un remate cruzado de Gabriel Menino que el arquero Bento, una de las figuras de su equipo, despejó.

Cuando los hinchas del “Verdao” comenzaron a imaginarse que el pase a la final se definía por penales (ya no cuenta la ventaja por el gol de visitante), faltando de seis minutos el Allianz Parque enmudeció ante el remate de afuera del área del uruguayo David Terans, quien consiguió la igualdad final. Con su grito y la paridad en el marcador, el Paranaense se instaló a la final.

Ahora el Paranaense buscará tomarse revancha de su mejor performance en la Copa Libertadores cuando también llegó a la final, pero cayó ante el San Pablo.

El otro finalista surgirá del ganador entre Flamengo y Vélez, que irá por una hazaña este miércoles al Estadio Maracaná luego de perder 0-4 en la ida en Liniers.

La final se jugará el sábado 29 de octubre en el Estadio Monumental de Guayaquil, en Ecuador.