La presidente Dilma Rousseff afirmó que hará todo lo que esté en su poder para impedir una recesión.
Varios economistas recortaron sus pronósticos económicos para Brasil. Morgan Stanley redujo su pronóstico de crecimiento del vecino país en el 2011 de 4% a 3,7%, mientras que bajó su previsión de expansión para el 2012 a 3,5% desde 4,6% anterior.
El Gobierno también está considerando recortar su previsión para el Producto Bruto Interno de este año a un crecimiento del 4% desde 4,5%, según publicó el periódico \”Valor Económico\”.
Rousseff afirmó que cree que la mejor manera de defenderse de la crisis es estimular el crecimiento del empleo. \”En el 2009, tomamos todas las medidas. Brasil entró en la crisis, tanto que tuvimos un declive en el PIB, pero (…) salimos de eso en el 2010\”, sostuvo Rousseff. \”Lo que estamos tratando de hacer este año es ni siquiera entrar en la crisis, pararla en la puerta. ¿Es difícil? Es difícil. No somos inmunes, no somos una isla\”, agregó.
\”El principal objetivo de mi Gobierno es (…) garantizar que, en este momento, seamos capaces de contener los efectos perversos de una crisis que no creamos y que podría golpear a Brasil\”, afirmó.
La alta inflación, superior a 7% al año, y una fuerte presión sobre las cuentas públicas se traducen en que esta vez el Gobierno de Brasil probablemente no tendrá muchas herramientas a su disposición para estimular a la economía.