Dijo que el candidato de la oposición “está haciendo una cantidad de promesas que sabe no va a cumplir”. El 31 es la segunda vuelta.

“Hay un adversario político que está haciendo una cantidad de promesas que sabe no va a cumplir, porque no las cumplió cuando fue gobierno, y que comienza a decir que va a cambiar toda la política económica”, dijo anoche el mandatario, quien retomó protagonismo en la campaña de la candidata oficialista Dilma Rousseff.

En declaraciones citadas por los diarios locales Estado de Sao Paulo y O Globo, Lula da Silva desafió: “es importante que diga qué va a cambiar porque el mundo está esperando que lo diga. El mercado está esperando porque no se puede actuar con irresponsabilidad, sin saber los efectos de ese tipo de declaración”.

“El tiene que explicar al pueblo brasileño -continuó- qué es lo que quiere cambiar de la política económica en un momento en que Brasil sirve de ejemplo al mundo como modelo de desarrollo, como generador de empleo, como estabilidad económica”.

También cuestionó las promesas de campaña del candidato del PSDB, quien dijo en distintas oportunidades que en un eventual gobierno va a incrementar el salario mínimo a 600 reales, que aumentará un 10 por ciento el pago a jubilados, que implementará el mes 13 de la Bolsa Familia y que adoptará una política cambiaria más competitiva.

“Nosotros sabemos distinguir lo que es una mentira de lo que es una verdad. Tenemos una propuesta de recueperación del salario mínimo hasta 2023 que va a duplicar el valor del salario mínimo, y combinamos ese ajuste al crecimiento del PIB y a la tasa de inflación”, dijo Lula al explicar su política de gobierno.

“Somos muy responsables y no vamos a estar subastando cosas en épocas de elección”, enfatizó.