El presidente Joe Biden anunció un nuevo paquete de ayuda por U$S 1.000 millones pero poco antes había presionado a Europa para que transfiera más armas.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció un nuevo envío de armamentos a Ucrania tras una conversación telefónica con su homólogo ucraniano, Volodimir Zelenski, esta vez por 1.000 millones de dólares, que incluye artillería, sistemas de defensa antibuques, municiones y sistemas avanzados delanza misiles.
“Reafirmé mi compromiso de que Estados Unidos apoyará a Ucrania en la defensa de su democracia y de su soberanía e integridad territorial frente a la agresión rusa no provocada”, señaló.
El mandatario también anunció otros 225 millones de dólares en asistencia humanitaria para el país europeo que se destinarán a alimentos, agua potable, suministros médicos y otros insumos de primera necesidad.
“La valentía, la resiliencia y la determinación del pueblo ucraniano continúan inspirando al mundo”, aseguró Biden.
Poco antes, desde Bruselas, el secretario estadounidense de Defensa, Lloyd Austin, instó al Grupo de Contacto sobre Ucrania a “intensificar” con urgencia el compromiso de entregar las armas que Ucrania reclama de manera insistente para dar batalla en el este del país, en la región del Donbass.
Casi medio centenar de ministros de Defensa, incluido el ucraniano Oleksiy Reznikov, participaron en esa reunión paralela aun encuentro ministerial de la OTAN.
“No podemos darnos el lujo de bajar los brazos y no podemos perder fuerza. Lo que está en juego es demasiado grande. Ucrania se enfrenta a un momento crucial en el campo de batalla”, añadió Austin.
El principal tópico de discusión del cónclave fue atender la demanda de Kiev de armas pesadas y en mayores cantidades para repeler la avanzada rusa en el Donbass.
Las autoridades ucranianas admitieron haber perdido el control del centro de la ciudad de Severodonetsk en una región controlada ya en gran parte por separatistas prorrusos desde 2014.