Dirigentes nacionalistas y colorados cuestionaron al mandatario argentino, mientras que desde el Frente Amplio criticaron al presidente uruguayo.

El fuerte cruce entre el presidente argentino, Alberto Fernández, y su par de Uruguay, Luis Lacalle Pou, tuvo fuertes repercusiones en la margen oriental del Río de La Plata, donde la discusión en la Cumbre del Mercosur tuvo repercusión en la política interna.

El diputado del Partido Colorado Conrado Rodríguez acusó a Alberto Fernández de “falta de categoría” y de ser “descortés”, mientras que su compañero de bloque Felipe Schipani fue mucho más duro al asegurar que la respuesta del mandatario argentino fue “más digna de un barrabrava que de un jefe de Estado”.

“¿Qué clase de Presidente Pro Tempore de un bloque de iguales es tan descortés con un colega que representa a un Estado y a un pueblo hermano? ¡Nunca visto!”. Consideró que para que el bloque “se fortalezca, ¡sus miembros tienen que poder desarrollarse!”, agregó Rodríguez.

Sin embargo, desde la oposición a Lacalle Pou no hubo defensa al presidente sino reproche por su cruce con el mandatario vecino.

El diputado frenteamplista Gerardo Núñez tuiteó: “Si somos un lastre que tomen otro barco”. La respuesta de Alberto Fernández al derrape del presidente”.

“¡Otro logro de la soberbia política, ahora queremos negociar solos con el mundo rico!”, cuestionó el senador frenteamplista Alejandro Sánchez.

La diputada opositora Claudia Hugo expresó: “Decir que el Mercosur es un ‘lastre’ es de una torpeza total. Flexibilizar no es lo mismo que agredir. Debemos cuidar nuestros lazos económicos y sociales que son parte de nosotros mismos”.

Daniel Caggiani, diputado frenteamplista, consideró a través de Twitter que el episodio entre los presidentes fue “otro exabrupto en nuestra Política Exterior”.

Ambos mandatarios se enfrentaron por la iniciativa de flexibilizar los aranceles del bloque regional para permitir que cada país pueda tener sus acuerdos unilaterales con naciones por fuera del Mercosur.

Lacalle Pou acompañó esa iniciativa del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro: “Obviamente que el Mercosur pesa, obviamente que su producción pesa en el concierto internacional, lo que no debe y no puede ser es que sea un lastre. No estamos dispuestos a que sea un corset del que nuestro país no pueda moverse”, advirtió el presidente uruguayo.

Fue entonces cuando Fernández le salió al cruce: “Si nos hemos convertido en una carga, lo lamento, no queríamos ser una carga para nadie. Una carga es algo que hace que a uno lo tiren de un barco y lo más fácil es bajarse del barco si la carga pesa mucho”.

“Terminemos con esas ideas que ayudan tan poco a la unidad. No queremos ser lastre de nadie, si somos un lastre, que tomen otro barco, pero lastre no somos de nadie. Para mí es un honor ser parte del Mercosur”, manifestó Fernández.