En medio de una crisis por las dificultades que enfrenta su Gobierno para lograr la aprobación en el Congreso de sus reformas políticas, económicas y sociales, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, rompió su alianza con partidos tradicionales en el Parlamento y pidió la renuncia de todos sus ministros para reorganizar su gabinete.
“A pesar de que mi gabinete, y su apuesta por el diálogo y el pacto, fue rechazado por alguna dirigencia política tradicional y del establecimiento, vamos a persistir con nuestro programa y nuestra vocación de grandes acuerdos nacionales”, justificó Petro su drástica decisión a ocho meses de haber asumido la presidencia.
La reforma de la salud es una de las grandes propuestas de Petro, empero el Pacto Histórico no ha logrado que pase los trámites parlamentarios por falta de apoyos partidistas.
Además de la reforma del sistema de salud, Petro impulsa un proyecto de reforma laboral y otro para modificar el sistema de jubilaciones.