La tira comenzó a publicarse en Clarín en 1977, con guión de Carlos Abrevaya, Jorge Guinzburg y Héctor García Blanco. Desde 2008, el autor se hizo cargo de los guiones.
Por encima de los logros profesionales y periodísticos, fue honesto con su vocación y profesión, pagando muchas veces un precio muy alto por serlo, en un país donde la degradación no excluye a algunos periodistas.
Desde el formato gráfico, abrazó al periodismo en su juventud y luego lo transitó en todas sus otras versiones: radio, TV, como productor, conductor y director de medios, lo que demuestra su pasión por la profesión.