Los rescatistas de Nepal encontraron este lunes la caja negra y la grabadora de voz de la cabina del avión de Yeti Airlines que el domingo se estrelló con 72 personas a bordo, de las cuales 68 está confirmado que fallecieron, una de ellas argentina.
Las otras cuatro personas continúan desaparecidas y según las autoridades, salvo un milagro, las esperanzas de hallar sobrevivientes son “nulas”.
El trágico hecho se produjo cuando el avión trataba de aterrizar en Pokhara (video en vivo), una localidad turística en el centro de Nepal: el lugar de la caída fue un desfiladero entre dos colinas cerca del aeropuerto.
Entre las 68 víctimas se reportó que se encontraba una argentina, Jannet Sandra Palavecino, con residencia en Neuquén, según la lista difundida por Yeti Airlines y la Autoridad de Aviación Civil de Nepal.
El momento en que el avión de dos motores ATR 72 cayó abruptamente quedó registrado en un video que rápidamente se viralizó en redes sociales.
El portavoz del aeropuerto de Pokhara, Anup Joshi, dijo que el avión se estrelló cuando se aproximaba al lugar y añadió que “volaba a 12.500 pies y estaba en descenso normal”. El clima el domingo estaba despejado
El accidente es el más mortífero en Nepal desde 1992, según la base de datos de la Red de Seguridad Aérea: en aquella oportunidad un Airbus A300 de Pakistan International Airlines se estrelló sobre una ladera al aproximarse a Katmandú, en un hecho que dejó 167 muertos.