La “traición” de De Narváez

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La noticia del abandono de Ricardo Alfonsín por parte de Francisco de Narváez llegó a ser \”trend topic\” ayer, sábado, en Twitter. Se trató de una primicia de gacetamercantil.com que fue confirmada recién hoy por algunas crónicas en medios importantes, pero lo central para nuestros lectores es que volvimos a anticiparnos con precisión: lo mismo ocurrió en el último año con nuestros adelantos de la renuncia de Mauricio Macri a la precandidatura presidencial; o el paso al costado de Ernesto Sanz en la interna radical.

Hemos tomado posición sobre la maniobra electoralista de Alfonsín y De Narváez en una columna anterior.

El intento por encubrir el paso dado por el empresario y diputado, que en la redes sociales se caracterizó sin más trámite como una nueva \”traición\” y otro golpe de \”oportunismo\” del \”Colorado\”, se vislumbra con claridad en la crónica del diario \”Clarín\” de hoy, que revela que De Narváez se vio anoche con los hermanos Rodríguez Saá, en San Luis, y que \”se reunirá el martes con Ricardo Alfonsín para reimpulsar la campaña conjunta en la provincia de Buenos Aires\”.

El candidato a gobernador bonaerense de UDESO \”seguirá siendo aliado de la UCR pero analiza también acercarse al espacio del peronismo disidente que lleva a Alberto Rodríguez Saá como postulante a la Presidencia\”, según confirmaron a \”Clarín\” fuentes de su entorno.

De qué manera podrá estar a la vez en los dos lados sin vencer las leyes de la física, se preguntará un lector atento. De acuerdo a lo que pudo saber \”Clarín\” de esas fuentes entornadas, De Narváez espera a que la Justicia defina si \”voltea o no la candidatura a gobernador de Buenos Aires de Adolfo Rodríguez Saá para ofrecerse entonces como alternativa bonaerense de ese sector del PJ opositor\”.

Pero resulta que, en paralelo a esa negociación, De Narváez \”continúa su alianza con Ricardo Alfonsín\”. Aquí se advierte que \”mantiene diferencias\” con el hijo del ex presidente por las resistencias que éste último recibe de parte de un sector de su propio partido. (¿Las diferencias son con él porque parte de su partido no lo apoya?)

Y aquí lo más risueño, si no se tratara de dirigentes que aspiran a una cuota importante de poder. Ayer, cuenta \”Clarín\”, De Narváez le pidió a la UCR que defina si apoya o no a su aliado (Alfonsín): \”Vamos a pedirle al radicalismo, con el que hicimos un acuerdo, con un candidato que la propia Convención avaló, que tome una línea política. Es difícil llevar adelante una unión electoral y de Gobierno con un partido que tiene una distorsión muy importante en el mensaje: por lo menos se ve confuso, el partido dice una cosa y el candidato otra\”, advirtió el diputado.

Esto es confuso pero que él se alíe con un partido a nivel nacional y luego de un fracaso rotundo en una interna en la que votaron 17 millones de argentinos, impulse la candidatura presidencial de otro, no es confuso, no. Es inmoral. Al menos eso es lo que entendieron miles de comentaristas en las redes sociales. Y lo que obligó a De Narváez y a su equipo de comunicación y marketing –ahora con Ramiro Agulla incluido– a trazar otra parábola en el aire para explicar lo inexplicable. Pero hay más.

Siempre según \”Clarín\”, devenido en \”explicador\” de sus cabriolas, De Narváez retomará el martes el diálogo personal con Alfonsín, \”quien resiste su plan de acercamiento a los Saá, aunque no dirá nada, al menos en público\”. Se reunirán para cerrar lo que viene y \”la estrategia estaría basada en el desdoblamiento de la campaña de ambos: De Narváez hará foco en las recorridas por todos los distritos de Buenos Aires (acompañado por la dirigencia radical) y Alfonsín en el resto del país haciendo foco en sus propuestas\”. Según la crónica, \”Por supuesto, harán campaña juntos, aunque con menos intensidad que antes de las primarias\”.

Maravilloso. Les faltó decir que de ahora en más dormirán en camas separadas. Se trata de salir como se pueda de esta situación incómoda y olvidar (ellos y los votantes, sobre todo) esta comedia de enredos políticos.

Como hemos dicho, la decisión de De Narváez de dejar a Alfonsín al costado del camino se debe a que considera que no le suma sino que le resta a su performance electoral en la provincia de Buenos Aires, el 23 de octubre. De Narváez se \”colgará\” del candidato presidencial Alberto Rodríguez Saá, hará campaña por él en territorio bonaerense, sea que su hermano Adolfo pueda seguir con su candidatura a gobernador allí o no. En el primer caso, debutaría una nueva figura en el Código Electoral, inaugurada por De Narváez: la de la \”colectora\” implícita.

Alfonsín y sus correligionarios, por su parte, dudan entre denunciar la deslealtad de De Narváez, su falta de ética, y hacer \”mutis por el foro\”. Al igual que Eduardo Duhalde, su campaña sigue paralizada y se preparan para ver, el 23 de octubre, un resultado todavía peor que en las Primarias. En buena medida es el pago a su decisión de aliarse a un enorme productor publicitario antes que a un referente político genuino. Nada es gratis.

*Director de gacetamercantil.com

@villalongaj

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