Ciegos que no quieren ver

Fecha:

Compartir

\”La Capìtal es un nido de gorilas\”; \”¿Los poteños son todos tarados?\”; \”Esta es una Ciudad de hijos de puta\”; \”¿No entiendo como puede haber ganado un estúpido como Macri\”. Estas son unas pocas de las cientos y cientos de frases que los militantes y simpatizantes del kirchnerismo postearon en la noche del domingo en Facebook y Twitter, entre otras redes sociales.

En cambio fueron pocos, muy pocos, los que admitieron que Daniel Filmus, es decir el gobierno nacional, tendrá que corregir errores de campaña para una segunda vuelta en la que las matemáticas y la lógica de la política le juegan en absolutamente contra.

\”La unica verdad es la realidad\”, decía el general Juan Domingo Perón, para usar una frase cara al sentimiento de los que perdieron. Y la verdad es que Mauricio Macri ganó por 20 puntos luego de tres años y medio de gobierno. Es más, en la primera elección de comuneros el PRO ganó en las 15 comunas de la Ciudad y en 12 tendrá mayoría propia. Negar eso es el peor punto de partida para sostener la utopía kirchnerista de ganarle.

Es cierto que Macri contó con una mirada más complaciente de los grandes medios nacionales, especialmente de La Nación; Clarín y TN, pero decir que ganó sólo por eso, como sugirió Filmus en su discurso del domingo a la noche, es en primer lugar una negación de la realidad y en segundo lugar implica potenciar hasta el absurdo a esos medios \”enemigos\”.

Filmus, quien ya fue derrotado por Macri en la elección y el ballottage de 2007, fue ungido como candidato por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien también decidió que el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, lo secundara en la fórmula y que el primer lugar de la lista de legisladores porteños lo ocupara Juan Cabandié, en representación de la agrupación de jóvenes kirchneristas \”La Cámpora\”.

Cabandié, un hijo de desaparecidos que fue recuperado por Abuelas de Plaza de Mayo, fue por la reelección como legislador porteño, pero en los hechos es una figura menos conocida que Filmus. Para revertir esto, buena parte de la publicidad de la campaña puso al diputado porteño al mismo nivel o incluso por delante del candidato principal. El problema fue que sacó la mitad de los votos.

La política es lo que es, no lo querríamos que fuese, suele decir este columnista, en un razonamiento análogo a aquel de Perón. Y lo que es, lo que ocurrió, es que la gestión macrista, con sus deficiencias, sus presupuestos subejecutados, su desapego a la política, acaba de ser plebiscitada y ganó con contundencia.

Pensar que casi la mitad de los votantes porteños son gorilas, infradotados y derechosos de diverso pelaje se parece mucho a la arrogancia y no es un buen punto de partida para convencer a la cuarta parte de esos mismos electores de que se pasen al sector de los \”iluminados\” en la segunda vuelta del 31 de julio.

El domingo por la noche, mientras Macri festejaba con una torpe danza su legítima victoriam los posteos burlones arreciaban. \”¿Cómo este tarado puede haber ganado?\”, se preguntó un kirchnerista dolido, y uno no pudo menos que acordarse de Carlos Menem, cuando la mayoría lo trataba peyorativamente por ser del interior, porque le gustaban las mujeres pintarrajeadas o porque se encandilaba con la Ferrari, sin reparar que estaba sometiendo al país a una serie de cambios cuyas consecuencias aún perduran.

* Periodista

Compartir

Últimas noticias

Suscribite a Gaceta

Relacionadas
Ver Más

Volver al Futuro 2024

*Por Augusto Neve El paso del tiempo nos aqueja. No lo...

No es ignorancia, es odio a España y a su legado: la Hispanidad

Las recientes declaraciones del flamante Ministro de Cultura, el...

El verso y la búsqueda de la felicidad

Vivimos perseguidos por las órdenes e indicaciones que en redes sociales nos muestran cómo debería ser nuestra vida, cuando la realidad parece encerrarnos en otro modelo.

Espiritualidad y vacío

¿Para qué vivir? ¿Por qué elegimos viviendo? ¿Para nada? El rol de la espiritualidad. Y También el de la ciencia y la tecnología.