El trámite se hará en el Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG). El viernes pasado los abogados de la familia cambiaron de estrategia y aceptaron la medida y la confrontación con las 2.500 muestras de ADN archivadas.
La extracción de sangre a los hermanos Marcela y Felipe Noble Herrera, hijos adoptivos de la dueña del Grupo Clarín, se hará mañana a las 9 en e laboratoriol del Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG).
La información fue suministrada por fuentes del juzgado de Sandra Arroyo Salgado, la jueza sanisidrense que entiende en la causa que investiga la identidad de los jóvenes.
Los análisis se realizarán justo una semana después de que los abogados de los hermanos le comunicaran a la jueza que, para “poner fin al acoso y persecución política y mediática de que son objeto”, aceptaban practicarse cuanto antes el examen de ADN para confrontarlo con todo el BNDG.
En el escrito que presentaron ante la magistrada federal de San Isidro, Marcela y Felipe expresaron que, “resignando sus derechos constitucionales” a la intimidad y a no someterse a una extracción compulsiva de sangre -prueba que no es admitida por la Corte Suprema-, ellos decidieron “no recurrir ante la Corte Suprema y pedirle a la Justicia que se lleve a cabo cuanto antes una nueva extracción de sangre para confrontar su ADN con todo el BNDG, tal como lo solicitan los querellantes y terminar así con el acoso y persecución que vienen sufriendo”.
A comienzos de año, la jueza Arroyo Salgado había ordenado la extracción compulsiva de sangre y la Cámara de Casación, el mes último, confirmó la medida, pero limitó el número de familias contra los que se podía hacer la comparación.