El entrenador de Independiente hizo referencia al momento que vive el club, tras el empate como local ante Almirante Brown. Sigue fuera de la zona de ascenso.
El entrenador de Independiente de Avellaneda, Omar de Felippe, hizo foco en la falta de acompañamiento y bajada de línea en el órden institucional del club, luego del empate con Almirante Brown 1 a 1, que no fue suficiente para que su equipo recupere el podio que permite el ascenso a Primera División.
“Hoy a las 5 de la tarde no sabíamos si jugábamos. El entorno no es fácil, esto es un quilombo. Hay que ponerse los pantalones largos y tomar decisiones. No sé sabía si había que poner las redes y cortar el pasto hasta último momento”, graficó el director técnico.
Después De Felippe subrayó: “No sé qué carajo esperamos para ver a dónde vamos. Hay que salir adelante, este plantel es lo que hay y hay que mejorarlo”.
“Pocas veces hablamos con el presidente (Javier) Cantero de lo que pasó y menos esta semana. Mi área es el equipo, hay cosas que deben resolver los dirigentes, no sería ético que yo me meta”, describió.
Y siguió: “No hay dirigentes en el vestuario, es lo que está pasando. Los jugadores saben todo y esto no tiene que ver con la plata, sin orden nada puede salir bien”.
“Estoy caliente, no jugamos bien, generamos mucho en los últimos minutos y erramos. Ellos nos llegaron y nos marcaron. Es un momento complicado, los chicos están sin confianza. Hay jugadores fundamentales que si no rinden afectan al equipo”, analizó.
Luego del partido, aparecieron pasacalles de apoyo a Hugo Moyano en las cercanías del estadio de Independiente. El sindicalista es opositor del presidente Cantero.