La Confederación Sudamericana aplicó una dura sanción política a la Asociación Uruguaya, luego de la renuncia de su presidente.
La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) comunicó en la noche del miércoles a la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) que le aplica una dura sanción política y como consecuencia de ello no podrá participar en el Comité Ejecutivo de la Conmebol, promover candidatos ni presentar propuestas en la dirección del fútbol continental.
Esta resolución es temporal hasta el 9 de junio, hasta un próximo Congreso de la Conmebol previo al Mundial y no afecta las actuaciones deportivas ni pone en riesgo la participación de Uruguay en el Mundial de Brasil 2014.
Esta sanción es parte de la crisis que está sufriendo el fútbol uruguayo, la cual explotó luego del encuentro por la Copa Libertadores entre Nacional y Newell’s Old Boys, en Montevideo, partido tras el cual hubo incidentes y dejó al desnudo una acumulación de deudas que el fútbol uruguayo tenía desde lo político y social.
El presidente José Mujica, ordenó en su momento retirar a la policía de las tribunas de los dos estadios de Montevideo, donde Peñarol y Nacional juegan de locales, y propuesto a ambos equipos reunirse para considerar nuevas medidas de seguridad.
Tras esa decisión, renunciaron el lunes pasado el presidente de la AUF, Sebastián Bauzá, y el Consejo Directivo, motivo por el cual ayer se realizó una asamblea extraordinaria con los representantes de los clubes, en la cual eligieron a Wilmer Valdez como presidente interino.
Además, se aprobó el nuevo Código Disciplinario de la FIFA, condición indispensable que había puesto el gobierno para levantar la suspensión al fútbol, la cual responsabiliza a las instituciones sobre el comportamiento de sus hinchas.
Durante esa reunión, llegó el comunicado de la Conmebol, que según informó el diario Ovación de Uruguay, causó sorpresa y era inesperada.
Por lo pronto, este fin de semana volvería el Torneo Clausura, pero sólo con los partidos pendientes de la novena fecha.