Es por “una amenaza elevada de extremistas violentos” y a un año del asalto al Capitolio por grupo ultraderechistas.
El Gobierno estadounidense está creando una unidad especializada de lucha contra el terrorismo interno para enfrentar “una amenaza elevada de extremistas violentos”, reveló este martes el subsecretario Matthew Olsen, de la División de Seguridad Nacional del Departamento de Justicia.
Durante una comparecencia ante el Comité Judicial del Senado, Olsen reconoció ante los legisladores que el país enfrenta “una amenaza elevada de extremistas violentos domésticos”, en referencia a las personas que “buscan cometer actos delictivos” dentro de la nación norteamericana con el objetivo de “promover objetivos sociales o políticos”.
Olsen realizó estas declaraciones cinco días más tarde de que se cumpliera un año del asalto al Capitolio, en Washington, que dejó un saldo de cuatro muertos y decenas de heridos cuando hordas de fanáticos ultraderechistas partidarios de Donald Trump irrumpieron en la sede del Legislativo para evitar que se certificara el triunfo del demócrata Joe Biden.
Como prueba de estos esfuerzos, Olsen recordó que las autoridades han arrestado e imputado a más de 725 personas por su participación en el asalto al edificio del Congreso.
“Hemos visto una creciente amenaza de aquellos que están motivados por animosidad racial, así como de aquellos que se adhieren a ideologías extremistas antigubernamentales y contra las autoridades”, agregó el funcionario ante el comité senatorial.
De acuerdo con Olsen, el Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) ha duplicado el número de investigaciones sobre presuntos extremistas violentos desde la primavera del 2020.
En ese sentido, explicó que, así como el departamento de Justicia combate el terrorismo internacional, también “utiliza todas las herramientas legales en nuestro arsenal para prevenir, interrumpir y enjuiciar actos de terrorismo doméstico”.
En las últimas semanas, diversas fuentes políticas y militares han advertido sobre la posibilidad de que grupos extremistas de derecha intenten derrocar al gobierno, antes o después de las elecciones presidenciales de 2024.
Entretanto, se supo que el Ejército llevará a cabo un extenso simulacro “realista” de guerra de “guerrillas” en zonas pobladas de los estados de Carolina del Norte y del Sur entre el 22 de enero y el 4 de febrero próximos.