Un proyecto de ley de la oposición se tratará el martes en la legislatura provincial y habilitaría un nuevo mandato de los jefes comunales que hoy no tienen reelecciones.
Tres semanas después de la ruptura del bloque radical en Diputados y de la conformación de 10 bloques minoritarios de Juntos por el Cambio en la Cámara baja del Congreso, la tensión en la principal fuerza opositora se traslada sin escalas a la legislatura bonaerense. La UCR, que ya sufrió la escisión de los legisladores del intendente de San Isidro Gustavo Posse, amenaza con romper con el PRO si no hay luz verde para tratar la modificación de la ley que limita las re-relecciones sancionada en 2016. Esa modificación, aunque perfecciona la norma, también habilita a que los intendentes que llevan dos períodos consecutivos en sus cargos puedan presentarse para uno más en 2023.
Los intendentes del PRO y la presidenta del partido, Patricia Bullrich, acompañan ese proyecto y cargan contra la ex gobernadora María Eugenia Vidal, que pugna por no entregar esa bandera que interpreta como uno de sus principales legados de gestión. Los jefes comunales electos en 2015 y reelegidos 2019 que deberían dejar sus cargos en 2023 aseguran que la ley es mala, porque facilita licencias y mecanismos para evadirla. Cerca de la actual diputada nacional por la Ciudad insisten en que el verdadero objetivo de los alcaldes es volver a abrir la puerta de las re-reelecciones indefinidas.
Luego de mantener conversaciones con los representantes del Frente de Todos, los senadores y legisladores que responden al radicalismo y a los intendentes del PRO esperan votar este mismo martes el proyecto que habilita a una nueva reelección a los intendentes y que fue presentado el jueves por los senadores provinciales de Juntos, el ex intendente de San Miguel y ministro de Gobierno de Vidal, Joaquín de la Torre, y Juan Pablo Allan, que responde a Esteban y Patricia Bullrich. Ese mismo día en la Legislatura se votará -con el antecedente del fracaso en el Congreso nacional- el Presupuesto 2022 de la Provincia. En la gobernación confían en que contarán con los votos de los intendentes opositores, necesitados de fondos y obras.