El Turismo Carretera ha dejado de existir

Fecha:

Compartir

El siete veces campeón de la categoría, Guillermo Ortelli, anunció su retiro. ¿Qué sucederá en el futuro?

El anuncio de Guillermo Ortelli de su retiro de la actividad automovilística deportiva profesional no es solamente el alejamiento de un piloto con siete títulos en el Turismo Carretera (el segundo más ganador en la historia de la categoría) sino también una noticia que trae adjunto el certificado de defunción, a sus 84 años, de la tradición más popular del mundo de los “fierros” en Argentina.

En nuestro país, el Turismo Carretera (TC) es sinónimo de carreras de autos. El público puede acercarse más a la Fórmula 1 en una temporada como la actual, con la lucha encarnizada entre Lewis Hamilton y Max Verstappen, pero el TC es el TC. En la década del ’80 y el ’90, la cupé Renault Fuego de Juan María Traverso captaba los principales flashes. Pero el TC era el TC y las multitudes se agolpaban para ver el duelo entre Ford y Chevrolet en los autódromos o a la vera de la ruta.

El automovilismo se popularizó definitivamente en Argentina en la década del ’40, cuando Juan Manuel Fangio con Chevrolet y los hermanos Juan y Oscar Gálvez con Ford surcaban (y a veces hasta creaban) carreteras que unían grandes ciudades con pequeños pueblos perdidos en la Puna, la Patagonia, Cuyo o la Mesopotamia.

Aquellos eran héroes de carne y hueso que, aunque sea una vez al año, cualquier habitante argentino podía ver en vivo y en directo cuando pasaba el Gran Premio del TC por la entrada a su pueblo. No ocurría eso con los goleadores de River Plate o Boca Juniors, a los que había que imaginarse por la radio porque no existía la televisión y ni siquiera llegaba El Gráfico con sus espectaculares fotografías.

El espíritu rutero del TC se propagó por todo el siglo XX. Los pilotos demostraban su talento y sus agallas en el mismo asfalto (o tierra) que el público transitaba en su vida diaria. Y a bordo de autos que la mayoría veía todos los días y que podía manejar: el Falcon, la cupé Chevy, el Torino y la cupé Dodge. 

En aquellos semipermanentes se vivía la tradición “teceísta” a pleno: los campeones corrían junto al crédito del pueblo que -con apoyo de una peña que esforzadamente juntaba dinero- ponía en la ruta un auto que llevaba con orgullo en el parabrisas el nombre de su localidad. Y miles de personas en los alambrados veían a las máquinas mientras comían los asados más ricos que pudieran saborearse. Claro que en las banquinas, alcantarillas y postes de luz también se coleccionaban accidentes, choques y muertes de pilotos, acompañantes y asistentes.

En 1997 se corrió la última carrera en ruta en Santa Teresita. Del plantel actual de pilotos del campeonato 2021, el único que corrió esa carrera es Guillermo Ortelli. Cuando todavía era “el pibe de Salto”, participó también en ese semipermanente de la costa atlántica en 1995 y 1996 y en las dos carreras en el semipermanente de Bolívar en 1995.

Ortelli fue campeón del TC en 1998, 2000, 2001, 2002, 2008, 2011 y 2016. Solo quedó atrás de Juan Gálvez, que ganó nueve títulos. Y por delante de Juan María Traverso (6), Oscar Gálvez (5), Dante Emiliozzi (4), Héctor Luis Gradassi (4), Roberto Mouras (3) y Oscar Castellano (3), quienes cimentaron su leyenda en las rutas argentinas.

“El Rey” era el último eslabón entre ese TC popular, familiar, rutero, esforzado, semiamateur y campechano con el superprofesionalismo del siglo XXI. Hoy los corredores se pierden del calor y cariño popular por estar encerrados en sus motorhomes analizando datos de la telemetría y pensando estrategias para bajar una centésima de segundo. O tienen la agenda ocupada con compromisos comerciales y mediáticos para poder juntar el dinero necesario para tener un auto de punta. Pocas veces se acercan a un alambrado o caminan por la calle de boxes para sacarse fotos o saludar a cada uno de sus fanáticos. No son más esos héroes cercanos que se creaban en el TC original. No es su culpa. La realidad los obliga a esto. El negocio funciona así. Pero así, el TC ya no es el TC.

Con la salida de Ortelli se acaba definitivamente la tradición. El TC ha dejado de existir. Alguna vez, la síndico Liliana Ripoll dijo “Racing ha dejado de existir” cuando el club de Avellaneda se presentó en quiebra. Años después, la funcionaria explicó que lo hizo para despertar en los hinchas y la dirigencia una reacción que sacara a “La Academia” se ese infernal pozo que amenazaba con borrarla de la faz de la tierra.

En la actualidad, en las tribunas de los autódromos se replican las críticas por carreras aburridas, sin sobrepasos, sin rivalidades como las que supo tener Ortelli, por ejemplo, con el “Gurí” Omar Martínez, con pilotos fríos, desangelados y lejos de la gente. Y por la TV se priorizan entrevistas en vivo con empresarios para dejar en diferido las series de la mañana. O “previas” que duran casi tanto como la competencia en sí. Para colmo, la Asociación Corredores de Turismo Carretera (ACTC) ya anunció que a partir de la próxima temporada se incorporará el Toyota Camry, un auto de nueva generación que nada tiene que ver con los históricos que el público cautivo ya no reconoce en pista con las modificaciones aerodinámicas y que el público joven jamás vio circular por las calles.

Si las crisis son los mejores momentos para nuevas oportunidades, el TC está ante una como nunca en su rica historia. Ortelli firmó ayer la muerte del viejo TC. Pero sobre su ejemplo se puede volver a refundar la categoría más popular del país, para que vuelva a ser. Si Racing logró un título (el primero local en tres décadas y media) dos años después de haber sido dado por muerto, ¿por qué el TC no puede volver a generar esa sinergia entre protagonistas y pilotos que la hizo la más popular de las categorías?

Compartir

Últimas noticias

Suscribite a Gaceta

Relacionadas
Ver Más

Dakar: el argentino Andújar, campeón en cuatriciclos

El bonaerense ya había ganado la edición 2021. Es el octavo título para el país en esta categoría.

Red Bull, aplastante: gana la Copa de Constructores seis fechas antes del final

Con otro triunfo de Verstappen, ahora en el GP de Japón, la escudería austríaca acumula 15 victorias en 16 fechas del campeonato de F-1.

Murió “Tito” Urretavizcaya, ídolo de la última época de oro del TC

Tenía 65 años y estuvo dos meses internado luego de un accidente en moto.