El DT terminó su ciclo al frente del “Xeneize” tras caer ante Estudiantes 0-2 en La Plata y quedar al fondo de la tabla y sin goles a favor en seis fechas.

El entrenador Miguel Angel Russo no continuará al frente del primer equipo de Boca Juniors desde este martes, lo que se confirmó después de una reunión que mantuvo en la mañana con el Consejo de Fútbol que conduce Juan Román Riquelme, tras lo cual el DT de la Reserva, Sebastián Battaglia, condujo el entrenamiento.

La derrota del domingo frente a Estudiantes en La Plata (0-2) fue la gota que colmó el vaso pero la falta de rumbo del entrenador, la notable falta de vocación ofensiva y los inconvenientes para identificar una idea de juego provocaron que la mayoría de los dirigentes consideraran que el ciclo hubiera llegado a su fin.

El contrato de Russo con Boca concluía en diciembre y la primera idea de Riquelme era esperar un gesto del director técnico, que no llegó porque quería continuar en el cargo.

Riquelme no vería con malos ojos que Battaglia inicie algo más que un interinato: “Estará a prueba pero ‘a priori’ es del gusto del Consejo”, anticiparon fuentes de la comisión directiva, claro que su continuidad, como la de cualquiera que se sienta en esa “silla eléctrica”, depende de cuan rápido traslade su idea a los jugadores. Y de que lleguen los resultados.

Aunque la preocupación por la falta de funcionamiento no era algo nuevo con Russo, las dos eliminaciones a River (ambas por penales) le habían dado un poco de aire para pasar las turbulencias. Y la escandalosa salida de la Copa Libertadores y la polémica por el aislamiento cambiaron el foco por un tiempo.

Sin embargo, la derrota frente a Estudiantes y la histórica racha de diez partidos sin ganar terminaron acelerando el final.

Boca tuvo un pésimo arranque de semestre: cayó eliminado en los octavos de final de la Libertadores (a manos de Atlético Mineiro, VAR mediante) e igualó sin triunfos la performance de 1957, la peor de la historia.

La alegría por eliminar a River en la Copa Argentina duró poco porque el “Xeneize” está penúltimo en la Liga Profesional, con 4 puntos, uno por encima de Rosario Central y Vélez.

Encima no hace goles, llegando a la marca de 599 minutos sin convertir que se cortó con el tanto en contra de Miguel Torrén -por un tiro libre de Edwin Cardona- en el empate por 1-1 contra Argentinos en La Bombonera.

El último tanto que anotó un futbolista de Boca fue el de Agustín Obando contra Unión en la primera fecha, hace 711 minutos.

La segunda época de Russo se terminó después de 59 partidos dirigidos, de los cuales 27 terminaron en victorias, hubo 21 en empates y once fueron derrotas.

Ese arranque que parecía demoledor en el primer semestre de 2020 se terminó diluyendo al punto de acumular apenas un triunfo en sus últimos 15 partidos y 82 días desde el último.

Russo se despidió de sus exjugadores y le pasó la posta a Battaglia, quien ya tuvo experiencias como técnico principal en Almagro, ayudante de campo en Banfield y hasta dirigió al “Xeneize”, con mayoría de jugadores de su Reserva, en medio del escándalo por el aislamiento de los titulares tras el duelo copero con Mineiro.

Battaglia estará acompañado por Juan Krupoviesa, otro exjugador de la institución que es su ayudante de campo en la división inferior.

Ambos se hicieron cargo del equipo ante Banfield y San Lorenzo, cuando  no se pudo contar con el plantel de profesionales y se debió encarar ambos partidos con un plantel combinado entre la Reserva y la Cuarta División.