A los 84 años, y tras haber contraído coronavirus, falleció un fanático “xeneize” reconocido por toda la hinchada cada vez que el equipo jugaba en La Bombonera.

La hinchada de Boca tiene la fama de ser la más seguidora del fútbol argentino. No por nada tiene el apodo de “La Doce”, conseguido allá lejos y hace tiempo, cuando en 1925 Victoriano Caffarena fue quien se pagó el viaje y acompañó al plantel en su famosa gira por Europa y se convirtió en el “jugador número doce” que acompañaba al equipo en todos los partidos. A partir de la década del ’60, el mito reencarnó en “La Raulito”, aquella querible mujer cuyos problemas de vida solo desaparecían cuando jugaba Boca. Y en los últimos tiempos, ese lugar había pasado a Oscar “Cacho” Laudonio, alias “el loco banderita”, que murió hoy a sus 84 años.

Laudonio, famoso por vestirse con un traje de murga con los colores azul y oro y agitar su bandera cuando los jugadores subían las escaleras del túnel instantes antes de saltar al césped, había contraído coronavirus en enero de este año.

“Boca Juniors despide con afecto a Oscar Laudonio, colaborador y un personaje entrañable de la vida del club, y acompaña a sus familiares y amigos en este triste momento”, fue el mensaje publicado por la institución en la red social Twitter.

Su presidente, Jorge Amor Ameal, también lo recordó: “Fue empleado, colaborador del plantel pero sobre todo hincha de Boca. Hizo flamear su banderita y su alegría durante años en cada salida del equipo a la cancha y se volvió un símbolo de pasión y amor ‘xeneize’. Hasta siempre, querido Oscar “Cachito” Laudonio”.

A partir de 1985, la imagen de Laudonio quedó inmortalizada al lado de grandes ídolos como Diego Maradona, Juan Román Riquelme, Martín Palermo y Carlos Tevez, entre otros.

El “Loco Banderita”, casado y padre de tres hijos, también solía arengar a los fanáticos durante el entretiempo agitando su bandera con la leyenda “Jugador N° 12”.

En su atuendo, a menudo portaba fotografías de figuras populares como Maradona, Juan Domingo Perón y “La Raulito”, quien había muerto en 2008.

En Casa Amarilla tenía lo que autodenominaba “Museo Laudonio”, en el buffet contiguo a La Bombonerita, donde exhibía sus fotografías con personalidades del ambiente político, deportivo y artístico.

Fue utilero del plantel de la Primera División y también de la Reserva hasta que se desvinculó en 2018, cuando lo acusaron de robarse un teléfono celular.

Laudonio tuvo un pasado de boxeador en clubes de Parque Chas, al igual que su hermano Abel, que fue púgil olímpico en Roma 1960.