La gobernadora bonaerense destacó que “en el 2023 no va a haber más barones del Conurbano” y sostuvo que era algo “impensado” cuando asumió en 2015.
La gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, afirmó hoy que la mayoría de los argentinos “no quiere más líderes mesiánicos” sino que la política “trabaje en equipo”, durante su discurso ante el Consejo Interamericano de Comercio y Producción (CiCyp.
Vidal resaltó los logros de su gestión al frente de la provincia de Buenos Aires en el comienzo de su discurso: “Cuando en diciembre de este año cumplamos cuatro años al frente de la Provincia, creo que podemos hacer un buen balance, sobre todo en momentos en que atravesamos dificultades. En momentos difíciles es bueno tomar una mirada con perspectiva”, manifestó.
“Elegir el camino profundo, no el del atajo, empieza a mostrar resultados. Seguramente muchas de las cosas de las que voy a hablar si las prometía en campaña desde 2015 tienen ese valor, de que eran impensables 4 años atrás”, dijo.
“No hay un solo municipio que pueda decir que no recibió obra pública. No hay ningún tipo de discrecionalidad en la asignación de fondos, todos los bonaerenses fueron beneficiados por las obras”, sostuvo.
“A pesar de las dificultades financieras que venimos atravesamos decidimos mantener las obras en ejecución y no ralentizarlas”, agregó. “Detrás de esas obras hay trabajo y frenarla significa sacar el trabajo a alguien”, destacó.
“Quien crea que la pobreza es solo un problema de ingresos no entiende que es mucho más profundo, es multidimensional, tiene que ver con el consumo, la violencia familiar, tiene que ver con el embarazo adolescente, con escuelas que no siempre están preparadas, con hospitales que no dan turnos para operaciones”, agregó.
Vidal sostuvo que “el ajuste tiene que llegar a la política” y enumeró algunas medidas de su gobierno en ese sentido: “Eliminamos las jubilaciones de privilegio, para la gobernadora, el gabinete, y por ley a partir del año 2016 todos tenemos que presentar nuestra declaración pública jurada y el único poder que faltaba, la Justicia, se adhirió por acordada el año pasado”.
“En el 2023 no va a haber más barones del Conurbano, todos los intendentes van a terminar su mandato. Si hace tres años en este lugar yo les hubiera dicho que en 2023 no iba a haber mas barones del Conurbano, que íbamos a hacer que todos los políticos iban a tener que presentar su propia declaración jurada, si hubiera dicho que iba a haber una reforma carcelaria, o que las madres pobres iban a dejar de ser sujeto de clientelismo, que todas las guardias de los hospitales iban a volver a funcionar, me hubieran creído? ¿Que era posible? Bueno, está hecho, fue posible”, enfatizó.
“Estos son logros. Por primera vez una gobernadora y un presidente trabajan sin mezquindad. Y hay mucho para hacer. Si bien estas cosas me enorgullecen, todavía estamos trabajando en cosas que debieron estar siempre. La provincia que viene está conectada, los chicos tienen educación de mejor calidad. Esta es una provincia con polos productivos. Enorme, llena de oportunidades y nuestro rol es el de ser facilitadores. No somos los protagonistas, ustedes y millones de bonaerenses son los protagonistas”, expresó.
“Y como confío en esos bonaerenses, los llamo a hacerse parte, la Argentina que cree que esto se resuelve con un líder mesiánico es la Argentina que fracasó en los últimos 40 años. Detrás de estos logros, hay millones de personas que estaban listas para dar esta pelea y por eso votaron un cambio”, sostuvo.
“La enorme mayoría no quiere más líderes mesiánicos, quiere equipo, equipo de toda la política y de todos los argentinos”, cerró.