La nueva joya futurista de la marca de BMW será tan rápida como su homólogo a nafta y podría estar en la calle el año próximo.
MINI está ultimando los detalles de su primer auto eléctrico puro. El primer ejemplar destinado al consumo de masas se apellidará Cooper S E y compartirá con el BMW i3 S un importante número de componentes, siendo los principales su propulsor eléctrico y su batería de iones de litio.
Es más, según informa Autocar tras acceder a información privilegiada, el MINI Cooper S E será tan rápido como su homólogo a nafta.
Ahora bien, ¿qué sabemos hasta ahora del MINI eléctrico? En primer lugar, que su desarrollo está realmente avanzado y se espera que sea presentado este mismo año, posiblemente coincidiendo con el 60 aniversario del icono británico.
El MINI fue inicialmente vendido bajo las marcas Austin y Morris, tras ser pergeñado por sir Alec Issigonis en 1959. Aquél pequeño coche urbano podía albergar a cuatro adultos, transportándolos cómoda y ágilmente. Uno de sus grandes éxitos fue el packaging de su motor, que propulsaba las ruedas delanteras del coche. Hasta donde sabemos, el MINI Cooper S E también será un divertido bólido de tracción delantera.
Tendrá detalles inspirados en el MINI Electric Concept pero no esperamos una gran diferenciación con respecto a otros MINI Cooper.
BMW quiere que el primer eléctrico de MINI sea un coche divertido de conducir, un atributo intangible que MINI siempre ha tratado de conservar en su ADN. Este auto se venderá en carrocerías de tres y cinco puertas, presumiblemente. Aunque estará construido sobre la misma plataforma modular UKL1 de todos los MINI “corrientes”, habría sido modificada para albergar una gran batería de iones de litio y un motor eléctrico. Esto parece la confirmación de que el primer MINI eléctrico no es un eléctrico dedicado.
Habrá que esperar un tiempo para conocer un eléctrico dedicado, que podría venderse en cualquiera de las demás carrocerías que la marca vende, como por ejemplo en la del MINI Clubman.
Volviendo al Cooper S E, recibirá el motor eléctrico de 184 CV del BMW i3 S, que desarrolla 270 Nm de par motor transmitidos al suelo mediante una caja de cambios de una única relación.
Ubicarán en un falso suelo – o quizá debajo el asiento trasero, ocupando parte del baúl– la batería de iones de litio y 33 kWh de capacidad del i3.
Su autonomía debería rondar o superar los 300 km, según el ciclo WLTP, pero en condiciones realistas rondará los 200 kilómetros.
Aunque será un auto más pesado y menos potente que el MINI Cooper S de nafta, su aceleración será comparable o superior gracias a la instantánea entrega de potencia de su motor eléctrico. En suma, promete ser un coche de ciudad ágil, cercano a los valores que le dieron a MINI su actual fama.
Tras ser presentado en la segunda mitad de 2019, su llegada a los concesionarios estará acompañada de un precio que en Reino Unido será de unas 30.000 libras esterlinas (unos 40.000 dólares).