Las primeras medidas de fuerza estaban convocadas para el 6, 7 y 8 de marzo.
El sindicato docente Ademys anunció hoy un paro en la ciudad de Buenos Aires para el 6, 7 y 8 de marzo, y se convirtió así en el primero de los gremios cuyos maestros porteños votan por una medida de fuerza que complica el inicio de clases en el 2019, ya que el resto de las agrupaciones todavía no se han manifestado y podrían sumarse a la huelga.
Por su parte, esta tarde los gremios docentes bonaerenses rechazaron la oferta de aumento salarial del gobierno provincial, que contemplaba la inflación del 2019 más un cinco por ciento, por considerar que “no respeta y achata la escala salarial” de los maestros, según dijo a la agencia estatal Télam la titular de la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), Mirta Petrocini.
El gobierno bonaerense había propuesto una recomposición salarial por el año 2018 de un 5% más el pago de lo que indique la inflación en 2019, lo que aseguraría “un salario mínimo para todos los docentes de $20.150 para el mes de marzo, para el maestro ingresante con turno de medio día”, dijeron a Télam fuentes oficiales.
En Santa Fe, el sindicato de docentes públicos de rechazó este miércoles la propuesta salarial ofrecida en paritarias por el gobierno provincial, e inmediatamente decretó tres días de huelga para la próxima semana, por lo que el miércoles “no comenzarán las clases como estaba previsto”, informaron fuentes gremiales.
El gobierno santafesino ofreció a los maestros un incremento salarial del 18 por ciento en dos tramos del 9 por ciento, a pagarse en marzo y agosto, y la aplicación de una cláusula gatillo a liquidarse en cualquier mes, de acuerdo a los índices de inflación.
La propuesta fue rechazada por la Asociación del Magisterio de Santa Fe (Amsafé), cuyos dirigentes indicaron que “debe mejorarse la oferta que se hizo, que se recupere lo que se ha perdido y permita afrontar a los docentes el año”.