Camioneros había dispuesto una medida de fuerza en reclamo de un bono de 9.500 pesos.
El Gobierno de la Ciudad dictó anoche la conciliación obligatoria entre el sindicato de Camioneros y las empresas de recolección de residuos tras la medida de fuerza lanzada por el gremio que había dejado las calles porteñas -y también en algunos partidos del Conurbano- inundadas de basura.
La Subsecretaría de Trabajo, Industria y Comercio, a cargo de Ezequiel Jarvis, dictó la conciliación obligatoria y se fijó una audiencia para el jueves 22 de febrero en las oficinas de esa cartera porteña, un día después de la movilización convocada por el gremio de Hugo Moyano contra el Gobierno nacional.
Así, el gobierno porteño buscó bajar la presión sobre el gobierno de Mauricio Macri de cara a la marcha del próximo miércoles,aunque antes podrían sumarse al trabajo a reglamento las ramas de Caudales y Combustibles.
El “quite de colaboración” o “trabajo a reglamento” dispuesto por Camioneros se dio en reclamo a un bono de 9.500 pesos.