Unos 800 efectivos fueron desplegados en el predio al que ingresaron más de mil familias. Las fuerzas de seguridad fueron enviadas por un precario acuerdo entre el Gobierno nacional y el porteño. Los ocupantes advirtieron que no se irán hasta que les den una vivienda.
Los vecinos de Villa Soldati cercanos al Parque Indoamericano tuvieron anoche su primera velada tranquila tras los enfrentamientos que protagonizaron en los últimos días con los ocupantes del predio de 130 hectáreas, que desde ayer a la tarde está cercado por unos 800 efectivos de Gendarmería.
Aompañados de tanquetas y bajo la vigilancia de varios helicópteros de esa fuerza, los gendarmes hicieron un dordón en la zona del parque más conflictiva, donde en la noche del viernes se produjeron los cruces más encarnizados entre los ocupantes y los vecinos de Villa Soldati y Lugano.
El grupo “Albatros” de la Prefectura fue asignado a custodiar los monoblocks aledaños, que el martes y el miércoles pasado fueron atacados en varias ocasiones por bandas que intentaron intrusarlos o entrar a robar.
El Gobierno nacional, tal como lo anunció ayer al mediodía el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, acordó con el de la Ciudad que enviaría efectivos de esas fuerzas de seguridad para evitar que ingresen más personas al parque y garantizar que no haya nuevos enfrentamientos.
Los vecinos dijeron anoche que se sentían “aliviados” por la presencia de los uniformados, según testimonios recogidos en el lugar por los medios.
Mientras tanto, los ocupantes del predio decidieron en una asamblea que no se irán del lugar hasta que reciban una “propuesta concreta” de las autoridades nacionales y locales para resolver sus problemas de viviendas.
Ayer a la mañana en la Casa Rosada se reunieron Mauricio Macri, los ministros porteños de Desarrollo Social, María Eugenia Vidal, y de Seguridad, Guillermo Montenegro, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, y el ministro del Interior, Florencio Randazzo.
Participaron también representantes de los ocupantes del parque y de los vecinos de la zona.
Los delegados realizaron una conferencia de prensa en la propia Casa de Gobierno, en la que criticaron a Macri por su inacción y sus promesas incumplidas en materia de viviendas.
Alejandro Salvatierra, de Ciudad Oculta, fue el primero de los cuatro oradores. “Entendemos que la toma del parque no es lo correcto, pero desde hace varios años estamos anotados en listados, pero pasan los años y las familias siguen viviendo en villas. Nosotros queremos pedir perdón por la ocupación. Pero la desesperación nos llevó a esta decisión”, indicó Salvatierra.
Fue Salvatierra quien dijo que no se irán del parque “hasta que nos den una vivienda, hasta que se ejecute un plan de vivienda para que se resuelva un plan habitacional”.
Lionel Pérez, de la villa 20, afirmó que hasta ahora “no se hizo ni una sola vivienda de la villa 20 que están prometidas por ley”. Y anticipó que van a seguir luchando “porque es nuestro derecho, no nos quedaba otra que hacer uso de ese parque para protestar y decirle al gobierno basta de mentiras. Hagan cumplir la ley”.
Al tomar la palabra, una de las vecinas sostuvo que la política de Macri “no fue la de incrementar la vivienda, no invirtieron nada en vivienda. La gente vive hacinada en la villa”, se quejó.
“Yo tengo que expresar un poco de alegría -dijo- porque desde la Nación plantearon que hay tierras, pero se tiene que hacer cargo el gobierno de Macri. No nos vamos a retirar del predio hasta que no tengamos vivienda”, subrayó.