Tras comprar al brasileño Neymar en 222 millones de euros, el club parisino sueña con la último joya del fútbol europeo, que fue tasado en 180M de euros por el Monaco.

Cuando el mundo del fútbol todavía no se ha tranquilizado tras el cimbronazo que significó el pase del brasileño Neymar del Barcelona al Paris Saint Germain por 222 millones de euros, el PSG amaga con dar otro golpe letal y llevarse a la joya más codiciada del mercado europeo: el francés Kilyan Mbappé, goleador del Monaco, que fue tasado en 180 millones de euros.

Figura en el último año en el equipo monegasco, el joven de 18 años está en el radar del Real Madrid desde hace meses. El conjunto español se caracteriza por ser protagonista de las transferencias de futbolistas más caras de cada mercado de pases, pero esta vez el PSG le ha quitado el trono.

Los 222 millones de euros desembolsados para pagar la cláusula de salida de Neymar del Barcelona convirtieron al pase del brasileño en el más caro de la historia. Pero ahora, el PSG quiere también tener la segunda mayor compra, si acepta pagar los 180 millones de euros que vale Mbappé según el Monaco.

La prensa francesa advierte que los dueños del club parisino, el Qatar Investment Authority (QIA), un fondo soberano de inversión que maneja los beneficios de la explotación del petróleo y el gas natural de ese país del Golfo Pérsico, no escatimarían su billetera a la hora de armar un plantel para ganar la próxima Champions League.

El presidente del PSG es Nasser Ghanim Al-Khelaïfi, amigo cercano del emir de Qatar, Tamim bin Hamad Al-Thani, y es quien está al frente de las negociaciones. Otra vez, los petrodólares inundan el fútbol. Y encienden las alarmas sobre “fair play financiero”, lavado de dinero y el miedo a los tradicionales equipos poderosos de ser desbancados por “los nuevos ricos”.