Ni un exvicepresidente, ni un actual gobernador de un estado “pesado” políticamente, ni un exsecretario de Estado ni un senador afroamericano. Todos estos dirigentes coquetean con sus buenos argumentos con ser precandidatos presidenciales por el Partido Republicano en Estados Unidos pero luego de que Donald Trump anunciara que irá por otro período en el salón oval de la Casa Blanca, hasta ahora solamente una mujer fue la que salió a postularse para competir en las elecciones internas de la oposición al actual jefe de Estado, Joe Biden.
Esa mujer es Nikky Haley, exgobernadora de Carolina del Sur y exembajadora ante la ONU, quien había prometido hace dos años no confrontar con su ahora exjefe político pero ahora explicó los motivos de su cambio de opinión
“Usted debe saber esto de mí. No tolero a los matones. Y cuando se les devuelve la patada, les duele más si estás usando tacos. Soy Nikky Haley y seré candidata a presidenta”, lanzó Haley, de 51 años, en un video.
La republicana argumentó que su giro se debía, entre otras cosas, a los problemas económicos del país y la necesidad de un “cambio generacional”, en alusión a los 76 años que tiene Trump.
La carrera de Haley
Nacida en 1972 en Bamberg, Carolina del Sur, hija de inmigrantes indios, su nombre completo es Nimrata Nikki Randhawa Haley.
Creció practicando el sijismo, pero se convirtió al cristianismo protestante en 1997, luego de su matrimonio en 1996 con Michael Haley, con quien tiene dos hijas.
Impulsó una ley para combatir la inmigración ilegal que, entre otras cosas, implantó el requerimiento de que los negocios en el estado verifiquen el estatus migratorio de los empleados.
En 2016 ordenó la remoción de la bandera confederada del terreno del Capitolio estatal.
Se trasnformó en la primera mujer de una minoría en gobernar su estado natal.
Como gobernadora -la primera de una minoría en Carolina del Sur- promulgó una ley estatal que prohíbe el aborto después de 20 semanas de embarazo.
Los otros postulantes en espera
Se espera que le sigan en los próximos meses varios líderes republicanos, entre ellos el gobernador de Florida, Ron DeSantis; el exvicepresidente Mike Pence; el exsecretario de Estado Mike Pompeo y el senador Tim Scott sigan el camino de Haley y se lancen a la arena de la interna del Partido Republicano.