El flamante presidente de la Nación, Javier Milei, aseguró este domingo que “no hay alternativa posible al ajuste”, en su primer discurso tras asumir en su cargo, en las escalinatas del Congreso Nacional frente a sus seguidores y no ante la Asamblea Legislativa, que era una tradición en estos 40 años de democracia ininterrumpida que se cumplieron también en esta jornada.
El líder libertario señaló que “ningún gobierno ha recibido una herencia peor” que la que el kirchnerismo le dejó, un “déficit gemelo (fiscal y externo) por 17% del PBI”.
“De esos 17%, el 15% corresponde al déficit consolidados del Tesoro y el Banco Central. No hay solución que evite atacar al déficit fiscal. 5% son del Tesoro y 10% del Banco Central: la solución es ajuste fiscal en el sector público que caerá casi totalmente sobre el Estado y no como en el pasado sobre el sector privado”, manifestó en el párrafo que más aplausos generó en la gente congregada frente al Parlamento.
“No hay plata. No podemos endeudarnos, no podemos emitir y no podemos seguir asfixiando al sector privado con impuestos. No hay alternativa al ajuste y no hay alternativa al shock. No hay opción entre gradualismo o shock: todos los programas de gradualismo terminaron mal. Todos los de shock, excepto el de 1959, terminaron bien. Para hacer gradualismo es necesario que haya financiamiento y, lamentablemente, tengo que decirlo de nuevo: no hay plata”, insistió el flamante jefe de Estado.
“Será duro. Pero como dijo uno de los mejores presidentes de la historia argentina, Julio Argentino Roca: ‘Nada grande, nada estable y duradero se conquista en el mundo, cuando se trata de la libertad de los hombres y del engrandecimiento de los pueblos, si no es a costa de supremos esfuerzos y dolorosos sacrificios’”.
“Nuestro país exige acción y una acción inmediata. No va a ser fácil. 100 años de fracasos no se deshacen en un día. Pero un día se empieza y ese día es hoy”, aseveró.