Días después de haber anunciado que aún no está en condiciones de reanudar el suministro de gas a través del gasoducto Nord Stream 1, clave para Alemania, la empresa rusa Gazprom difundió un ominoso video en el que muestra a Europa congelada acompañado de la frase “El invierno será largo”, emuló la de la serie “Game of Thrones”: “Winter is coming”.
En las imágenes un operario de la compañía energética estatal rusa cierra un interruptor y un reloj que marca la temperatura baja abruptamente, tras lo cual se observa el frío avanzando sobre el Viejo Continente.
El video generó un rechazo generalizado en los países europeos, que enfrentan una suba de los precios de la energía sin antecedentes en las últimas cuatro décadas a causa del conflicto ruso-ucraniano.
Gazprom anunció el viernes que no podía reanudar por ahora el suministro de gas natural a través de ese ducto unas horas antes de que estuviera previsto reanudar el servicio, alegando la necesidad de encarar urgentes trabajos de mantenimiento.
La principal compañía energética del país euroasiático había cerrado el miércoles ese gasoducto para lo que dijo que serían tres días de tareas rutinarias de chequeos, pero en una publicación en las redes sociales el viernes por la noche dijo que había detectado “fallas” en una turbina y anticipó que el gasoducto no funcionaría a menos que se solucionaran.
Se trata del último acontecimiento en una saga en la que Gazprom ha argumentado problemas técnicos como razón para reducir los flujos de gas a través de Nord Stream 1, explicaciones que las autoridades alemanas han rechazado por considerarlas una pretexto para sostener un juego de poder geopolítico tras la invasión rusa de Ucrania, iniciada el 24 de febrero pasado.
La empresa aseguró haber detectado fugas de aceite en cuatro turbinas de la estación de compresión de Portovaya, en el extremo ruso del gasoducto, incluida la única operativa. Y señaló que recibió advertencias del organismo de control de la seguridad industrial de que las fugas “no permiten un funcionamiento seguro y sin problemas del motor de la turbina de gas”.
“En relación con esto, es necesario tomar las medidas adecuadas y suspender el funcionamiento de la… unidad de compresión de gas en relación con las graves violaciones (de seguridad) identificadas”, adujo la compañía.
Gazprom empezó a cortar el suministro a través de Nord Stream 1 a mediados de junio, alegando retrasos en la entrega de una turbina que había sido enviada a Canadá para su reparación.
Desde entonces, Canadá autorizó la entrega de la turbina a Alemania, que ha dicho que no hay nada que impida su envío a Rusia. En las últimas semanas, Nord Stream 1 ha funcionado apenas al 20% de su capacidad.
Paralelamente, la invasión derivó en que Berlín desistiera de autorizar la puesta en funcionamiento del Nord Stream 2, un gasoducto que une Rusia con Alemania por el mar Báltico, que fue terminado a comienzos de año.