La investigación incluye los posibles delitos de fraude cometido contra el medio ambiente y contra los consumidores.
La justicia española notificó este martes al grupo automotriz alemán Volkswagen su imputación como persona jurídica en la investigación iniciada tras el escándalo de sus motores diésel trucados.
Un portavoz del grupo en España confirmó que la Audiencia Nacional, principal instancia penal española, les comunicó la imputación por fraude, entre otros delitos.
“Nos hemos puesto a total disposición de las autoridades como siempre hemos hecho”, dijo Ramón Paredes, uno de los dirigentes de Volkswagen España tras la vista.
“La investigación está en marcha y no podemos facilitarles ningún dato”, añadió la fuente.
La justicia española anunció a finales de octubre la apertura de esta investigación por posibles delitos de fraude, contra el medio ambiente y contra los consumidores.
El gigante automovilístico alemán había admitido en septiembre haber colocado en los motores diésel de once millones de vehículos en todo el mundo un programa capaz de falsear los resultados de las pruebas anticontaminación.
La confesión provocó un terremoto en el gigante alemán, que es objeto de varias investigaciones judiciales en otros países como Estados Unidos, Alemania, Francia o Italia.
El grupo automovilístico está inmerso desde principios de noviembre en otro escándalo tras admitir que mientió sobre las emisiones de CO2 de 800.000 vehículos en todo el mundo, pero la investigación española no apunta a esta última confesión.