Incluye la baja a la mitad de la tasa sobre las cotizaciones patronales y de los trabajadores con el fin de impulsar un mayor consumo.
El presidente estadounidense Barack Obama presentó hoy (jueves 8) ante el Congreso un plan de lucha contra el desempleo que tendrá un costo de unos 447.000 millones de dólares, más de la mitad de ellos en reducción de impuestos.
El plan prevé una baja a la mitad del actual impuesto sobre las cotizaciones patronales y de los trabajadores para 2012, según detalles del plan avanzados por la Casa Blanca.
Eso representaría un recorte de ingresos para el Estado de 240.000 millones de dólares, además de 5.000 millones en la prolongación de ayudas.
El plan propone luego 140.000 millones de dólares en medidas de promoción de empleos, básicamente con la recontratación de profesores y de personal de servicios de socorro (policías y bomberos).
Esa parte de la propuesta incluye además la creación de un banco de obras públicas, y la modernización de escuelas y el transporte.
El tercer capítulo del plan propone prolongar las ayudas a los desempleados y fondos para programas de reconversión profesional, todo ello por un monto de 62.000 millones de dólares.