Lo definieron en una teleconferencia celebrada hoy tras otra de los viceministros de Finanzas del G20, que integra la Argentina. Sarkozy y Cameron discutieron cómo enfrentar la especulación contra el Euro, que se aceleró por la rebaja de la nota de la deuda de EE.UU. La apertura de los mercados, mañana, provoca gran incertidumbre.
Los líderes de los bancos centrales de la Zona Euro acordaron hoy (domingo 7) intervenir decisivamente en los mercados para responder a la escalada de la crisis de la región, según reveló una fuente monetaria después de la teleconferencia del Banco Central Europeo (BCE).
La entidad adoptó esta noche esa decisión clave para aliviar las tensiones que sacuden a España e Italia en los mercados financieros.
Apremiado por el temor a un hundimiento en las Bolsas, el organismo decidió la compra de deuda pública española e italiana en un intento por aliviar los elevados intereses que exigen los inversores a los bonos de ambos países.
El presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, convocó por la tarde a una videoconferencia urgente con los consejeros de la autoridad monetaria de la que salió la decisión de \”aplicar activamente\” el programa de compra de deuda de países con problemas, según el comunicado hecho público sobre las 11 de la noche (hora de Bélgica).
Aunque no detalla expresamente qué tipo de deuda se adquirirá, el comunicado arranca con un reconocimiento de las reformas en Italia y España y con la convicción de que es \”esencial\” aplicarlas para reducir los desequilibrios, lo que equivale a decir que estos serán los países beneficiados por la compra de bonos. La decisión significa un salto cualitativo en inercia de la autoridad monetaria respecto a la compra de deuda de países en problemas.
El programa se activó en marzo, en principio para adquirir bonos griegos, y el jueves Trichet habló de reactivarlo, aunque solo se detectaron movimientos que tenían como objetivo la deuda irlandesa y portuguesa. Pero pasar de auxiliar a esos países, de reducida dimensión, a intervenir en Italia y España representa un importante paso en la estrategia de la autoridad monetaria.
El BCE concluyó casi tres horas de conversaciones con la determinación de \”responder decisivamente\” a los embates de los mercados, según fuentes del organismo, que analizó \”cuidadosamente\” la situación de España e Italia y valoró \”los anuncios de los Gobiernos\” de ambos países en el sentido de acelerar las reformas.
\”El eurosistema intervendrá de forma muy significativa en los mercados y responderá de un modo cohesionado\”, aseguró las mismas fuentes.
Finalmente se tomó una medida difícil y pese al recelo alemán: la compra bonos italianos por parte del BCE para evitar que Italia y España sigan la estela de Grecia y dejen de afrontar los intereses que les piden por su deuda.
Los responsables monetarios de la eurozona mantuvieron una inusual conferencia telefónica hoy para tratar de acordar una acción clara de la entidad en la apertura de los mercados, mañana, ante la crisis desatada por la baja del ránking de deuda de Estados Unidos, decidida el viernes pasado por la agencia Standards & Poor\’s.
Los inversores esperan ansiosamente que el organismo comience a comprar mañana, y de manera masiva bonos de deuda italiana y española para estabilizar los valores, una medida que dividía al consejo directivo del BCE.
Italia, que está en el objetivo de los especuladores, afirmó el viernes que el BCE podría comprar obligaciones italianas el lunes, pero por el momento ese proyecto no fue confirmado en Francfort, donde la entidad tiene su sede. \”La conferencia no estaba inicialmente prevista en la agenda, pero no diría que se trata de una reunión de urgencia\”, afirmó una fuente del BCE, tratando de bajar el tono.
Trichet anunció el viernes que la entidad reanudaría sus compras de bonos estatales, suspendidas desde mayo, tratando de calmar los mercados. Pero que no podía precisar si la institución podría comprar o no bonos del Tesoro de España e Italia.
\”El BCE debe hacer su trabajo y apoyar la estabilidad en los mercados\”, le contestó hoy la ministro de Economía española, Elena Salgado.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, quien lidera el G-7 y el G-20, discutió el sábado por teléfono con el primer ministro británico David Cameron. \”Ellos hablaron sobre el área euro y la rebaja de deuda de Estados Unidos. Pero ambos acordaron la importancia de trabajar juntos, supervisar la situación de cerca y mantenerse en contacto durante los próximos días\”, dijo un portavoz de Cameron.
No obstante, y con el fin de dar la sensación de manejo de la situación, Sarkozy decidió continuar con sus vacaciones en el Mediterráneo francés.
En Washington, un asesor de la Casa Blanca criticó con dureza a S&P por rebajar la calificación de deuda de Estados Unidos desde \”AAA\” a \”AA+\”, una medida que podría afectar a los mercados financieros al aumentar el costo del endeudamiento y complicar una recuperación prolongada.