Fue después de diferencias surgidas con Adolfo Rodríguez Saá, pero podría haber otra chance el próximo jueves 14, antes del receso invernal.

Cuando todo parecía cerrado para que este jueves el Senado tratara el controvertido proyecto kirchnerista de reforma de la integración de la Corte Suprema, surgieron problemas de último momento para conseguir el quórum y la sesión se cayó.

El oficialismo tiene 35 legisladores propios y el apoyo de dos aliados, pero el puntano Adolfo Rodríguez Saá comunicó que tenía objeciones y un proyecto propio y finalmente no hubo sesión en la Cámara alta.

La semana pasada siete gobernadores participaron del plenario de comisiones dando el respaldo a la iniciativa que tanto interesa a la vicepresidenta Cristina Kirchner.

Se firmó el dictamen de mayoría con la ausencia de los senadores de Juntos por el Cambio, que rechazan la intención de ampliar a 25 la cantidad de integrantes del máximo tribunal de Justicia del país.

En principio se dijo que la sesión se haría el próximo jueves 14 pero ante el comienzo del receso invernal se apuró la convocatoria para este jueves.

La bancada oficialista tiene 35 senadores propios, que apoyan abiertamente la iniciativa. A esos se le suman sus habituales aliados: el rionegrino Alberto Weretilneck, de Juntos Somos Ríos Negro; y la misionera Magdalena Solari Quintana, del Frente Renovador de la Concordia.

Además, en los últimos meses se convirtió en aliada del FdT la peronista riojana Ada Clara del Valle, del monobloque Hay Futuro Argentina, pero la repentina postura de Rodríguez Saá cambió todo y ahora habrá el oficialismo deberá recalcular su estrategia si quiere sacar el proyecto, que de todos modos naufragará en la Cámara de Diputados.

La iniciativa de Rodríguez Saá impulsa la idea de que la Corte vuelva a tener nueve miembros. Su hermano, el gobernador Alberto Rodríguez Saá, fue uno de los mandatarios provinciales peronistas que apoyaron la iniciativa del gobierno y de CFK.

Pero la enemistad entre los dos hermanos y búsqueda de diferenciación del Adolfo puso una impensada piedra en el camino.

Weretilneck presentó en abril una iniciativa que propone elevar a 16 los miembros del máximo tribunal, con una representación federal (tres jueces por región) que garantice y promueva la paridad de género.

Este martes, Weretilneck y la gobernadora de su provincia, Arabela Carreras, estuvieron reunidos con el presidente Alberto Fernández y hablaron, entre otros temas.

El proyecto K, que consta de sólo cuatro artículos, establece llevar a 25 los integrantes de la Corte Suprema y establece que el Senado deberá darle acuerdo a otros 21 cortesanos propuestos por el Poder Ejecutivo, tal como lo establece la Constitución Nacional, respetando la designación de los actuales cuatro miembros: Horacio Rosatti, Juan Carlos Maqueda, Ricardo Lorenzetti y Carlos Rosenkrantz.

Desde la reforma de 2006, la Corte Suprema funciona con cinco integrantes y así lo hizo hasta noviembre del año pasado, cuando Elena Highton de Nolasco se jubiló.

El primer artículo de la norma, no obstante, anuncia que en una futura “ley especial” se definirá “el modo de organización y funcionamiento” del Supremo Tribunal.

La idea es que esa “ley especial”, cuyo proyecto aún no fue presentado, establezca ciertas pautas como la división en salas, la integración por regiones y otros objetivos para, según dicen los fundamentos de la ley presentada por José Mayans y Anabel Fernández Sagasti, “fortalecer la inmediatez de los expedientes”.