El exmarino había sido condenado por la justicia española a 1084 años de prisión.
El represor Adolfo Scilingo, quien saltó a la fama en la década del ’90 por haber reconocido su participación en los llamados “vuelos de la muerte” durante la última dictadura cívico-militar en la Argentina, recuperó hoy su libertad en España luego de pasar 22 años, un mes y 10 diez detenido en España.
Scilingo estaba preso, con una condena a 1084 años de prisión. Sin embargo, se acogió a un beneficio penitenciario que le permite terminar de cumplir su condena en libertad, con la condición de realizar tareas comunitarias durante el día y pernoctar en un Centro de Inserción Social dependiente de la Comunidad de Madrid, según informó hoy el diario Vozpopuli.com.
El exmarino realiza tareas comunitarias en una pequeña iglesia en el centro de Madrid.
Scilingo fue condenado en España como responsable de 30 asesinatos y una detención ilegal y como cómplice de otras 255 detenciones ilegales.
“Todos los miércoles se hacía un vuelo y se designaba en forma rotativa distintos oficiales para hacerse cargo de esos vuelos. A los que el día antes se les elegían para morir, se les llevaba al aeropuerto dormidos o semidormidos mediante una leve dosis de un somnífero haciéndoles creer que iban a ser llevados a una prisión del Sur”, contó en 1997, ya en la cárcel.
“Una vez en vuelo, se les daba una segunda dosis muy poderosa, quedaban totalmente dormidos, se les desvestía y, cuando el comandante daba la orden, se les arrojaba al mar uno por uno”, relató en aquel momento. Más tarde, cambió su versión y dijo que lo forzaron a contar “la mentira más grande del mundo”.