Las autoridades informaron que además hay unos 200 desaparecidos, por lo cual el número de víctimas fatales aumentará en las próximas horas.
Otras 13 personas fueron halladas muertas en la zona afectada por el gigantesco incendio que se registra desde el jueves pasado en el norte de California, Estados Unidos.
Ahora, el número de víctimas fatales ascendió a al menos 44, aunque hay unos 200 desaparecidos, por lo cual las autoridades estiman que la cifra de muertos aumentará.
El llamado “Camp Fire” se convirtió en el siniestro más mortífero de la historia del estado de California, por encima del incendio de Griffith Park de 1933 en Los Ángeles, donde murieron 29 personas.
En declaraciones a medios norteamericanos, el sheriff del condado de Butte, Kory Honea, explicó que de los 13 muertos, 10 estaban en la ciudad de Paradise, de 26.000 habitantes.
Paradise fue completamente tragada por las llamas, lo que ocasionó perdidas totales a muchos ricos y famosos que usan ese pueblo como lugar de veraneo.