La máquina será exhibida por el médico Philip Nitschke, fundador y director de la asociación proeutanasia “Exit International”.

El médico Philip Nitschke presentará el lunes en la ciudad de Adelaida la primera cápsula que permitirá a las personas que afronten enfermedades terminales quitarse la vida en forma voluntaria de acuerdo a la ley de eutanasia, vigente en el estado de Victoria, Australia.

La máquina, denominada “Sarco”, será exhibida por el médico australiano Philip Nitschke, fundador y director de la asociación pro eutanasia Exit International.

El aparato, cuyo funcionamiento en los próximos días será mostrado con una animación virtual, podrá ser utilizado legalmente en el estado de Victoria donde desde hace casi un año la eutanasia es permitida legalmente en determinadas condiciones para pacientes terminales.

En Victoria, los pacientes terminales deben contar con autorización médica y un diagnóstico de tan solo seis meses de expectativa de vida para poder reclamar el uso de la ley de eutanasia.

“Sarco” consiste en una cápsula tipo sarcófago, montada sobre una plataforma, a la que el paciente ingresa y digita un código -que previamente le fue enviado tras una evaluación psiquiátrica- y el dispositivo comienza a liberar nitrógeno para adormecer definitivamente a la personas que podrá ser sepultada con esa máquina contenedora.

Las presentaciones del aparato comenzarán el lunes en Adelaida, la ciudad donde comenzó a estudiar Nitschke, y luego continuarán por Perth, Canberra y Sydney.

El especialista aclaró que para utilizar el Sarco, los pacientes tendrán que completar un formulario para que se puedan evaluar sus facultades mentales, tras lo cual se le otorgará un código válido durante 24 horas para que utilice la máquina.