Dice que fue al Coloquio por primera vez porque antes no lo habían invitado. Pero colegas suyos del mismo “palo” no aparecen ni aunque les manden helicóptero.
Gerardo Ferreyra es, junto a su socio Osvaldo Acosta, uno de los dueños de Electroingeniería S.A., y nunca ha disimulado su afinidad con la Admnistración K, en especial con su política “latinoamericanista”. Ambos pasaron los violentos ’70 con dificultad: se habían alistado en el Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT) que lideraba el santiagueño Mario Roberto “Roby” Santucho. Y sufrieron cárcel.
Pero más allá de su posición ideológica, lograron armar un grupo que ellos insisten en remarcar que no creció lo que dicen que creció sólo gracias a sus fluídos contactos con el superministro Julio De Vido.
Descontracturado como siempre, Ferreyra apareció en la noche del jueves por el Coloquio de IDEA y su visita causó cierta sorpresa ante la total ausencia de funcionarios nacionales y de empresarios K. Él contesta que vino este año “porque es la primera vez que nos invitaron, nada más”.
Y habrá que creerle, pero otra vez demostró que es un valiente. O un osado. O ambas cosas a la vez, siempre teniendo en cuenta que ser valiente no significa no tener miedos, sino animarse a enfrentarlos. Algo que no ocurre con empresarios como tan K como él como Cristóbal López.