El cazador cazado

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El premio que le otorgó al escritor peruano la Feria del Libro de Guadalajara mientras la Justicia de su país lo investiga por plagio, generó una polémica en la que unos \”se cuelgan\” de la ética y otros, de la calidad literaria.

Por Martín Ungaro

“Los grandes problemas requieren de grandes decisiones\”, parecen decir por estos días las autoridades dela Feria Internacionaldel Libro (FIL) de Guadalajara.

Los mexicanos resolvieron que el premio otorgado todos los años por esa organización no sea entregado durante el transcurso de la muestra, la más grande en idioma español, sino en Lima. Aunque sea por esta única vez…

¿Por qué? Porque un escándalo, en el que algunos utilizan armas como “la ética” y otros esgrimen puñales como “la calidad literaria”, les estalló en la cara a sus organizadores y no saben cómo salir. En 2012, el galardonado es, nada más ni nada menos que “un quemo” como el peruano Alfredo Bryce Echenique, cuyos plagios se dan por probados enla Justiciade su país.

La Feriade Guadalajara, la cita más importante del mercado editorial en nuestra lengua, anunció que Echenique iba a recibir el premio por su obra, lo que motivó una andanada de mofas y diatribas por parte de intelectuales mexicanos y de otros países latinoamericanos.

El peruano, ni lerdo ni perezoso, dijo; “si no me quieren, no voy”, pero se aseguró que una comisión dela FILviaje para otorgarle el galardón y los 150 mil dólares que vienen con el premio.

“Comprendemos el malestar de quienes han protestado contra la decisión del jurado y respetamos las posturas críticas expresadas”, sostuvola FILen un comunicado en el que adelantó que Bryce no viajará a Guadalajara.

Un vocero del comité organizador de la muestra le dijo a la agencia “AFP” que la decisión “es inédita” ya que “jamás se había entregado fuera de Guadalajara”.

Las primeras “viñas de ira” vinieron del lado de escritores e investigadores literarios mexicanos, que recordaron en un pronunciamiento público que “el plagio es apropiación indebida e ilegal del esfuerzo, del trabajo, de las ideas y de la creatividad de otros”.

Entre esos críticos se encuentra Soledad Loaeza, reconocida intelectual y catedrática del Colegio de México, quien llamó al jurado dela FILa “no condonar el plagio”. En ese sentido, los críticos recordaron que el escritor es objeto de un proceso por parte del Instituto Nacional de Defensa dela Competenciay dela Proteccióndela Propiedad Intelectualde Perú.

Del otro lado, el jurado que entregó el premio -entre quienes se destacan el narrador mexicano Jorge Volpi y el ensayista peruano Julio Ortega- argumentó que las acusaciones de plagio “competen al ámbito penal y corresponde a los tribunales, no a un jurado literario, decidir”. También definió que el premio es por la “obra narrativa” de Echenique y por la “relevancia que, a lo largo de más de cuatro décadas, ésta ha adquirido en la literatura del siglo XX”.

La revista “Nexos”, reconocida entre intelectuales mexicanos y que tuvo al peruano como colaborador hasta 2007, publicó siete artículos firmados por Echenique, acompañados de textos aparecidos en el periódico “La Vanguardia” y la revista “Jano”, ambos de España. Defensa dela Competenciadice que todos “fueron plagiados”.

Como única respuesta, Echenique lamentó en una carta reproducida por la misma revista “el rencor y la envidia” que provocó el otorgamiento del premio dela FILde Guadalajara. Un provocador, sin duda.

“Quienes me atacan en México diciendo que me han multado, deben rectificarse y reconocer que se han indignado excesivamente”, sostuvo el escritor al asegurar que las multas impuestas por el supuesto plagio le fueron devueltas. Nada de eso fue confirmado por la organización peruana.

Es que hay algo que molesta en el medio: un premio de 150.000 dólares que ganaron grandes escritores como el colombiano Fernando Vallejo, el portugués Antonio Lobo Antunes o el español Juan Goytisolo.

La mejor defensa que recibió Echenique fue la de 110 escritores y críticos hicieron un pronunciamiento en favor de su obra: “La campaña de prensa que algunos órganos de comunicación han emprendido en su contra nos resulta de una violencia inusitada, alarmante en una sociedad democrática”, indicaron en una carta, entre ellos Almudena Grandes.

La mexicana Loaeza lamentó, en tal sentido, que haya “una extraordinaria tolerancia frente al plagiario, cuando es uno de los pecados más graves que se puede cometer cuando uno escribe”.

“Nexos”, en tanto, engordó el debate al asegurar que jugó un “papel involuntario” en el escándalo de plagio al difundir las notas plagiadas por Bryce.

El jurado dela FIL, en cambio, no quiere discutir nada: contra las diatribas y los insultos, mantuvo el premio, que ahora será entregado el 24 de noviembre en Lima, por “el conjunto de la obra literaria de Bryce Echenique”, indicaron en el pronunciamiento público los miembros del jurado encabezados por Volpi.

Podría preguntársele a este narrador mexicano si está seguro de que el escritor peruano no plagió también algunas de sus novelas. Como se sabe, hasta el premio Nobel de Literatura Camilo José Cela fue finalmente condenado por haber “robado” un libro a una escritora novel.

Así es comola FILde Guadalajara puso al autor de “Un mundo para Julius” en el centro de una tormenta. Esta vez, el cazador fue cazado.

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